jueves, 21 de octubre de 2010

59. 24 de Octubre de 2010

PRIMERA LECTURA
Lectura del libro del Eclesiástico 35, 12-14. 16-18
El Señor es un Dios justo,
que no puede ser parcial;
no es parcial contra el pobre,
escucha las súplicas del oprimido;
no desoye los gritos del huérfano
o de la viuda cuando repite su queja;
sus penas consiguen su favor,
y su grito alcanza las nubes;
los gritos del pobre atraviesan las nubes
y hasta alcanzar a Dios no descansan;
no ceja hasta que Dios le atiende,
y el juez justo le hace justicia.
Palabra de Dios.

MEDITACIÓN
El fragmento proclamado este domingo pertenece al libro escrito por Simón, hijo de Sirá (Ben Sirá), un hombre culto y experimentado que escribió su obra en hebreo hacia el año 197 a.C. para reafirmar a los judíos que vivían fuera de Palestina, en la Diáspora, frente a la cultura helenística.
El autor es a la vez un fervoroso ritualista y un moralista cuidadoso y así nos ofrece una enseñanza de gran validez que se resumen en la unión entre culto y vida. Es decir, no podemos separar la práctica de los sacramentos (Reconciliación y Eucaristía) de la vivencia del amor.
Y así el texto ofrecido hoy es precedido por una afirmación clave: “No trates de sobornar al Señor, porque no lo aceptará; no te apoyes en sacrificio injusto” (Eclo 35,11).
Frente a la tentación de reducir nuestra vivencia cristiana a la mera práctica sacramental y rezo de unas oraciones, Dios nos enseña, a través de Ben Sirá que ésta cuando no va acompañada de la justicia no es aceptada por Él. Así lo afirma previamente: “sacrificios de posesiones injustas son impuros” (Eclo 34, 18).
Por otra parte Dios ha tomado partido por un grupo muy concreto de la población: los pobres. Los verbos refuerzan esta afirmación: “No puede parcial, no es parcial, escucha, no desoye, consiguen, alcanza, atraviesa, alcanzar, no descansan, no ceja, hace”. El pobre personificado en el oprimido, la viuda y el huérfano es el que conmueve el corazón de Dios. Sus oraciones tienen el valor que no tienen las que realizan los que le oprimen, los que creen que Dios no ve como quitan el sustento al pobre.
Así pues, podemos recordar la campaña del curso pasado, centrada en el compromiso con la sociedad y especialmente con los más desfavorecidos. También debemos leer este texto a la luz del nuevo curso. ¿En las actividades qué lugar ocupan las personas necesitadas de nuestro entorno, el barrio o pueblo? Dios no sólo escucha las oraciones de quienes rezamos en el centro junior o en la Iglesia, su atención se dirige más a los que en sus hogares, sufriendo la pobreza y marginación por ser inmigrantes, pertenecer a otra etnia, estar sufriendo la crisis o sentirse rechazados por los vecinos del barrio o pueblo, lloran y rezan. Y nosotros, ¿tenemos la sensibilidad para escucharles?
Desde que hemos comenzado el curso estamos recibiendo llamadas de Dios, quizás creamos que sólo es a través del consiliario y Juniors, pero… meditando este texto, que es Palabra de Dios, ¿a través de quienes puede estar llamándote Dios?

SALMO RESPONSORIAL. Sal 33, 2-3. 17-18. 19 y 23 (R/.: 7a)

R/. Si el afligido invoca al Señor, él lo escucha.

Bendigo al Señor en todo momento,
su alabanza está siempre en mi boca;
mi alma se gloría en el Señor:
que los humildes lo escuchen y se alegren. R/.

El Señor se enfrenta con los malhechores,
para borrar de la tierra su memoria.
Cuando uno grita, el Señor lo escucha
y lo libra de sus angustias. R/.

El Señor está cerca de los atribulados,
salva a los abatidos.
El Señor redime a sus siervos,
no será castigado quien se acoge a él. R


MEDITACIÓN
Con Israel: este salmo es de los llamados alfabéticos, es decir, cada versículo comienza con una letra. La composición si la escribiésemos en castellano sería (p.ej.: A – A Dios alaben los pueblos; B – Bueno es el Señor; C – Cantadle al amanecer; D – Día y noche bendecir al Señor; E – En todo momento aclamad a Dios;….). Para comprenderlo conviene no quedarse con los versos aquí proclamados, sino leerlo y meditarlo en su totalidad, abriendo la Biblia por el Salmo 34 (33). Su mensaje es de alabanza a Dios porque escucha al pobre y lo protege, enfrentándose a los que obran el mal.
Con Jesús: el salmo encuentra eco en el Nuevo Testamento y así Jesús llama bienaventurados a los pobres (Mt 5,3), da gracias al Padre por haber revelado estas cosas a los pobres y humildes (Lc 10,21) y María al igual que el salmista es la pobre que alaba a Dios y proclama a quien derriba del trono a los poderosos y enaltece a los humildes, a los hambrientos los colma de bienes y a los ricos los despide vacíos (Lc 1, 52-54). Por otra parte este pobre tiene un rostro muy concreto: Jesús. Él es pobre por excelencia, de quien el Padre cuida y a quien escucha.
Con nuestro tiempo: ¿Quién escucha al pobre? Sí, en nuestra sociedad hay infinidad de ongs e instituciones, miles de personas que le escuchan, para quienes el pobre no es un problema, sino un reto, un hermano al que acoger y librarle de sus angustias. Llámese inmigrante, enfermo terminal, madre que desea dar a luz un hijo en contra de la voluntad de sus familiares, preso en la cárcel,… Ellos, aunque no sean creyentes, están cerca de Dios, porque han sintonizado con su corazón.
Con los juniors: Con otras palabras, el mismo mensaje. Es la respuesta del pobre que ha experimentado la escucha y protección de Dios. ¿Y nosotros? Llevamos el nombre de Cristo, tratamos de vivir la Ley Junior (amar a los demás como Jesús nos y los ama). En el Corazón de Jesús el pobre ocupa un lugar privilegiado, ¿lo ocupa en nuestros centros? ¿los acogemos allí? ¿nos hemos reunido con Cáritas Parroquial para ofrecer el centro a los hijos de las personas necesitadas que ellos atienden? ¿Qué parte del presupuesto del curso vamos a destinar a los pobres, al menos el 0,7%?
Carlos G. Vallés. Busco tu Rostro. Sal Terrae.
http://www.mercaba.org/DIESDOMINI/T-O/30C/marco_do_30c.htm

SEGUNDA LECTURA
Lectura de la segunda carta del apóstol san Pablo a Timoteo 4, 6-8. 16-18

Querido hermano:
Yo estoy a punto de ser sacrificado, y el momento de mi partida es inminente.
He combatido bien mi combate, he corrido hasta la meta, he mantenido la fe.
Ahora me aguarda la corona merecida, con la que el Señor, juez justo, me premiará en aquel día; y no sólo a mí, sino a todos los que tienen amor a su venida.
La primera vez que me defendí, todos me abandonaron, y nadie me asistió. Que Dios los perdone.
Pero el Señor me ayudó y me dio fuerzas para anunciar íntegro el mensaje, de modo que lo oyeran todos los gentiles. Él me libró de la boca del león.
El Señor seguirá librándome de todo mal, me salvará y me llevará a su reino del cielo.
A él la gloria por los siglos de los siglos. Amén.

Palabra de Dios.

MEDITACIÓN:
El Apóstol Pablo se encuentra en la cárcel, en unos tiempos donde muchos reos sabían que sólo saldrían de ella para ser ejecutados. Y así lo expresa con dos imágenes, una propia del culto y la otra de la navegación. Él como la víctima en el altar va a derramar su sangre pero desde la experiencia de la resurrección, no es el final, su vida seguirá como quien parte de la orilla para adentrarse en el mar. Su identificación con Jesucristo es total, muere para abandonarse, con las velas de la fe, la esperanza y el amor, en las aguas de la Vida. Seguidamente remite a los usos deportivos y militares (combate, meta, corona), a los que une la confianza absoluta en quien no le ha abandonado: Dios. Jesucristo, con quien se ha identificado hasta como Él pasar por un malhechor y ser abandonado por todos, ha sido y es el centro de su vida, de su pensamiento y su actuar.
Como bien puedes observar Pablo se ha identificado con Jesús, al final de su vida hace memoria de ella, desde el amor incondicional hacia Cristo y su Mensaje. También nosotros, los juniors, tal como nos definimos somos “testigos de Cristo en el mundo”. Y en esta lectura, penetrando en el corazón del Apóstol Pablo, descubrimos algunos rasgos de quien es testigo de Cristo. Por eso la lectura te puede ayudar a mirar hacia atrás: ¿podrías afirmar como Pablo “he combatido bien mi combate”?
EVANGELIO
+ Lectura del santo evangelio según san Lucas 18, 9-14

En aquel tiempo, a algunos que, teniéndose por justos, se sentían seguros de sí mismos y despreciaban a los demás, dijo Jesús esta parábola:
— «Dos hombres subieron al templo a orar. Uno era fariseo; el otro, un publicano. El fariseo, erguido, oraba así en su interior:
“¡Oh Dios!, te doy gracias, porque no soy como los demás: ladrones, injustos, adúlteros; ni como ese publicano. Ayuno dos veces por semana y pago el diezmo de todo lo que tengo.”
El publicano, en cambio, se quedó atrás y no se atrevía ni a levantar los ojos al cielo; sólo se golpeaba el pecho, diciendo:
“¡ Oh Dios!, ten compasión de este pecador”.
Os digo que éste bajó a su casa justificado, y aquél no. Porque todo el que se enaltece será humillado, y el que se humilla será enaltecido.»

Palabra del Señor.

MEDITACIÓN
De nuevo Jesús nos presenta dos personajes contrarios, tal como había realizado anteriormente (Samaritano/sacerdote-levita, hijo menor/hijo mayor, Lázaro/rico), los excluidos frente a las personas “respetables” de la sociedad.
La parábola se dirige a los que se tienen por justos y desprecian a los demás. En este grupo se encuentran los fariseos, pero no sólo ellos, también los que entre los discípulos los que se consideraban primeros y por extensión el evangelista es probable que se refiera a determinados miembros de su comunidad. Por tanto el destinatario es ese “ego”, sacerdote, junior, que se cree mejor sacerdote o educador que sus hermanos.
La escena se sitúa en el templo y los personajes son: el fariseo y el publicano. El primero pertenece al grupo de los “puros”, los que cumplen estrictamente la ley. El segundo forma parte de los cobradores de impuestos, quienes amparados por el ejército romano pagaban al Imperio una cantidad, para después cobrarla con la comisión que querían al pueblo.
El contenido de la oración es diametralmente opuesta. La oración del fariseo en principio es correcta: alaba y da gracias a Dios por ser una persona que evita el pecado (no roba, es justo y evita el adulterio) y practica la virtud (ayuna y contribuye con las necesidades de la religión). Pero la vivencia de la Ley, en sí buena y necesaria, queda truncada en su actitud: se considera superior y mejor que los demás, despreciando a quienes no son como él. Es decir, el amor a Dios no le impulsa a amar a sus hermanos, luego no ama a Dios.
Por otra parte el publicano es un pecador y es consciente de lo difícil que es recibir el perdón de Dios, pues tendría que devolver todo lo que ha robado y renunciar a su medio de vida. Por eso, a diferencia del fariseo, no pasa al atrio de los israelitas, no se siente digno de entrar en su templo. Su oración es breve, inspirada en el salmo 51 (ten piedad de mí, Señor).
Y Jesús aporta el significado de la parábola. El fariseo a pesar de rezar y cumplir no conoce a Dios, porque no ha experimentado su amor. “Mi humillación es mi exaltación y mi exaltación es mi humillación”, afirma sabio judío Hillel.
LOS SANTOS PADRES
¿Qué ganancia hay en ayunar dos veces por semana si eso sólo sirve como pretexto de tu ignorancia y vanidad, y te haces soberbio, altanero y egoísta?
Entregas el diezmo de todo lo que tienes y presumes de ello. Incluso provocas la ira de Dios al condenar y acusar a otros por ello.
Estás hinchado de orgullo, y sin embargo no has sido coronadopor la sentencia divina dictada con justicia. Al contrario, amontonas alabanzas para ti mismo. Modérate a ti mismo ¡oh fariseo! Coloca una puerta con su candado en tu lengua. Le hablas a Dios que lo sabe todo. Espera la sentencia del juez.
Nadie que sea diestro en la lucha se corona a sí mismo. Nadie, tampoco, recibe la corona de sí mismo, sino que espera la decisión del árbitro…
Abaja tu orgullo, porque la arrogancia es maldita y odiada por Dios. Es extraña para la mente que teme a Dios.
El mismo Cristo dijo: No juzguéis y no seréis juzgados; no condenéis y no seréis condenados.
Nadie que goce de buena salud ridiculiza a quién está enfermo por encontrarse postrado en la cama. Más bien se asusta un poco,porque tal vez podría ser víctima de sufrimientos similares.
Una persona que se encuentra en la batalla, al caer otro, no se felicita a sí mismo por haber escapado de la desgracia.
La debilidad de otros no es objeto adecuado para exaltar a aquellos que gozan de buena salud.
Cirilo de Alejandría

Es más arduo confesar los pecados de uno mismo que las virtudes, y Dios mira al que lleva mayor carga.
Efrén de Nisibi.

Por tu parte, tú no te exaltes nunca sobre nadie, aunque sea el mayor de los pecadores. Muchas veces la humildad salva al que cometió muchos y grandes pecados.
Basilio
El maligno te embriagará abundantemente para que no reconozcas que todo le pertenece a Dios, no a ti.
Sahdona

ORACIÓN DESDE LA METODOLOGÍA JUNIOR.

Experiencia:
Comienza situándote, tal como se indica en el libro Cridat, para orar es importante descalzarse, es decir, crear un espacio distinto. Y para ello basta con que tú sientas que Dios está ahora y aquí contigo. Moisés oró mientras estaba trabajando, cuidando de los rebaños de su suegro, en el lugar donde las ovejas pastaban. También a ti se acerca ahora, en tu habitación donde estudias, lees, navegas. El espacio no en sí es neutro, es Dios quien con su presencia lo sacraliza. Y Él está aquí.
Una vez has tomado conciencia de que Dios está en tu interior y por tanto el espacio donde te encuentras y el tiempo que vas a dedicar a encontrarte con Él son sagrados. Anota en una hoja o trae a la memoria lo que sigue: personas o grupos (religiosos, políticos, culturales,…) que me caen mal y me cuesta aceptarlas, nombre, apellidos, lugar donde viven, relación que tengo con ellos, motivos por los que me caen mal, sus defectos. Con sinceridad, ¿qué sientes en estos momentos por ellos? anótalo.
¿Los identificarías con alguna de estas imágenes?


¿Cómo te sientes ahora? Cuéntaselo a Jesucristo, con sinceridad. Exprésale a Jesús tus sentimientos. Haz una oración dándole gracias a Dios por no tener los defectos que ellos tienen.
Dibuja dos monigotes, uno eres tú y el otro son ellos, situados a la distancia que creas.
Reflexión.-
Toma la Biblia y lee el Evangelio de este domingo. Mira los monigotes. ¿Dónde estás tú? ¿Dónde están ellos? Enmárcalos dentro del triángulo que simboliza a Dios.

Compromiso.-

Plantéate cambiar de actitud de cara a ellos, para lo cual tienes un buen medio, cuando tengas pensamientos despreciativos recuerda esta parábola.

Celebración:

Reza lo que espontáneamente brote en tu corazón, pídele perdón a Dios, relee el evangelio, ahora, reconociendo tu pecado, situándote con la imaginación, visualizando la escena, en el lugar del publicano, rezándole con sus mismas palabras, sintiendo vergüenza por haber actuado así. Y en el clima de oración destruye la hoja, pidiéndole a Dios que también lo borre de tu corazón.

ORACIÓN AL COMIENZO DE LA REUNIÓN

EXPERIENCIA:

Elementos presentes siempre en las oraciones: cruz de San Damián (Togo), icono de la Virgen María, Biblia abierta y cartel.

Signo de esta semana: vela encendida.

Preparación: tomamos conciencia de encontrarnos en un lugar sagrado, para ello colocamos los signos con pausa y solemnidad. Si es en la mesa de reuniones, la vaciamos, colocamos un mantel blanco y la cruz, icono, biblia, cartel, vela, encendemos la vela. Dios está aquí y nos llama.

Proclamación de la Palabra de Dios: uno de nosotros toma la Biblia y lee Éxodo 3, 1-5
REFLEXIÓN:

Interiorización:
Adora en silencio… reconoce lo importante que Él es en tu vida… Siente su grandeza y su pequeñez. No digas nada, sólo siente su presencia amorosa ante ti, ante nosotros.
Mira alrededor, los signos que recuerdan su presencia. Contempla tus manos, están ante Dios. Siente los pies, como tocan el suelo, es suelo sagrado, como el que pisó Moisés. ¿Qué sientes?


COMPROMISO:

Gesto: nos arrodillamos.

CELEBRACIÓN:

Oración final: cantamos la canción Descalzate (CD Cridat).
Oración.

DESCÁLZATE, DESCÁLZATE,
BAJO TUS PIES LA TIERRA ES SAGRADA,
DESCÁLZATE. (Bis)

Como cada día sales buscando los mejores pastos,
un poco de agua, una brisa suave, no esperas nada más;
atrás quedaron los tiempos de ideales y utopías,
ahora sólo deseas poder vivir en paz.

Pero sin buscar, encuentras; cuando callas hay respuesta,
él te quema con su fuego si te dejas abrasar.

DESCÁLZATE...

Una zarza que arde con un fuego que no se consume,
una voz que te llama y te invita a despertar.


DESCÁLZATE, DESCÁLZATE,
BAJO TUS PIES LA TIERRA ES SAGRADA,
DESCÁLZATE.
DESCÁLZATE, DESCÁLZATE,
QUÍTATE LAS SANDALIAS, DESNUDA TUS PIES,


GUIÓN CELEBRACIÓN DE LA EUCARISTÍA.
Monición de entrada:
Queridos hermanos:
Este domingo tiene un nombre un poco raro, Domund, que quiere decir Do de Domingo, Mund de Mundial y al que añadimos de las Misiones. Es el domingo que los cristianos en misa dedicamos a las misiones, a rezar por los misioneros y ayudarles a hacer realidad sus sueños, que son el que los niños y mayores de sus parroquias conozcan a Jesús y tengan alimentos, escuelas y medicinas.

Señor, ten piedad.
Tú que te has hecho pobre. Señor, ten piedad.
Tú que no miras mal a los demás. Cristo, ten piedad.
Tú que nos enseñas a ser buenos. Señor, ten piedad.

Monición a las lecturas.
Ahora seguro que hay personas que están pasándolo mal, ellos rezan, pero os preguntaréis, ¿Y Dios los escucha? Estemos atentos y sabremos la respuesta.

Monición evangelio.
Hola, os voy a contar lo que me ha pasado. Yo no soy un niño que me porte muy bien, no voy nunca a misa y hago baste enfadar a mis maestros y padres. Pero mira por donde, hoy me he acercado a la Iglesia y he sentido algo especial, quería pedirle perdón a Dios y ser mejor. Pero claro, al entrar la gente me ha mirado mal, todos menos uno, sabéis ¿quién?

Homilía. colocamos delante de los niños algunos objetos procedentes de África, América o Asia. Les preguntamos sobre el origen y a partir de ahí les hablamos de las misiones. Podemos relacionarlo con la parábola del fariseo y publicano, enseñándoles a no despreciar a quienes vienen de estos países.

Peticiones.-
Por la Iglesia, para que quiera mucho a los pobres. Roguemos al Señor.
Por los gobernantes, para que ayuden a los países pobres. Roguemos al Señor.
Por los misioneros, para que no se cansen. Roguemos al Señor.
Por los niños, para que ayudemos a los niños que no tienen tantas cosas. Roguemos al Señor.
Por los niños que viven en las misiones, para que Jesús escuche sus oraciones. Roguemos al Señor.
Por nosotros, para que seamos misioneros, es decir, ayudemos a los que sufren. Roguemos al Señor.

Ofrendas.-
Te presentamos el cartel del domund que nos recuerda a los misioneros.
Te presentamos el pan y el vino, que nos enseña que tú te haces presente en las cosas pobres y sencillas.

JÓVENES EJEMPLARES:
Santos Manuel Morales, Salvador Lara y David Roldán,
laicos de la Acción Católica, mártires. (15 de Agosto)
Manuel Morales nació el 8 de febrero de 1898 en Mesillas, (Zacatecas, México), ingresó en el Seminario de Durango, pero las necesidades familiares le obligaron a abandonar este camino, contrayendo en 1921 matrimonio con Consuelo Loera. Fruto del amor entre ellos nacieron tres hijos. Su amor a Cristo lo vivió en el hogar, siendo un esposo y padre ejemplar, a la vez que formó parte de la Acción Católica, siendo Secretario del Círculo de Obreros Católicos León XIII y Presidente de la Liga Nacional de la Libertad Religiosa, fundada con el fin de lograr éste derecho humano en México.
Salvador Lara Puente nació en El Súchil (Durango, México) el 13 de Agosto de 1905. Fue Presidente de la Acción Católica (A.C.J.M.) y Secretario de la Liga Nacional de la Libertad Religiosa, colaborando con el párroco en las tareas pastorales. Era un joven de una gran bondad e integridad.
David Roldán nació en Chalchihuites (Zacatecas, México) el 2 de Marzo de 1907. Huérfano de padre, también por necesidades familiares se vió obligado a abandonar el seminario y trabajar en la misa El Conjuro. Allí su carácter responsable y su preparación le llevó a ser persona de confianza del Gerente de la empresa, Sr. Windel y contable de la empresa, siendo muy querido por todos. La relación con éste le llevó a ser novio de su hija. Era un joven responsable, entregado al igual que Salvador Lara a la pastoral parroquial, ayudando a D. Luis Batis. Fue elegido Presidente de la Acción Católica en 1925 y Vicepresidente de la Liga Nacional Defensora de la Libertad Religiosa.
Su vida como bien podemos observar iba tejiéndose desde la vivencia de la fe en el hogar, el trabajo, la parroquia y el asociacionismo católico. Pero el 29 de Julio de 1926 el párroco Luis Batis organizó un encuentro con la ayuda de los militantes de la Acción Católica. El lugar elegido fue la plaza de toros de Chalchihuites. Allí los feligreses, siguiendo las instrucciones de la Liga Nacional Defensora de la Libertad Religiosa, fueron informados de sus derechos y deberes como ciudadanos y cristianos. Aquella reunión tuvo sus consecuencias. En la noche del 14 de agosto de 1926 el párroco fue detenido.
Pero sus jóvenes colaboradores del párroco no permanecieron pasivos. Salvador Lara convocó una reunión de la A.C.J.M., a fin de buscar el medio de liberar a su párroco. Los soldados irrumpieron en ella y detuvieron a Manuel, Salvador y David, llevándolos a la Presidencia Municipal, donde se encontraba el sacerdote. Allí les llamaron perros fanáticos y les amenazaron con colgarles. Sin embargo la presencia del pueblo pidiendo les liberase, hizo que desistiesen por unos instantes de este cometido. Por otra parte quien espera ser suegro de David, el Sr. Windel, ofreció en rescate una notable cantidad de dinero. La respuesta fue: “No hay necesidad, van a Zacatecas con el fin de tomarles declaración, pero no les pasará nada”.
Sin embargo no fue así. Al mediodía del 15 de agosto fueron llevados los cuatro fuera de la ciudad. Al llegar al puente de Santa Teresa obligaron a bajar a D. Luis y Manuel.
El párroco intentó salvarle, diciendo a los soldados pensasen en su esposa e hijos, pero la respuesta de Manuel antes de morir resumió su vida de fe: “Deje que me fusilen, Sr. Cura. Yo muero, pero Dios no muere. Él velará por mi esposa y mis hijos”.
Las balas acabaron con el sacerdote y con quien tenía 28 años. Mientras sus amigos David y Salvador, presenciaban el martirio. Tras derramar su sangre ordenaron a les ordenaron pasear. apoyados en las exclamaciones en honor a Cristo y a la Virgen, serenos y en oración, después de dar ciento sesenta pasos acogieron los disparos de los soldados, sin perder la serenidad y la paz.
Sus restos son venerados en el Templo parroquial de Chalchihuites. En 1992 fueron beatificados por Juan Pablo II y el 21 de Mayo de 2000 el Papa los canonizó.

jueves, 14 de octubre de 2010

Nº 58. 17 de Octubre de 2010. Domingo XXIX.

Destellos
DOMINGO XXIX. 17 de Octubre de 2010. Nº 58 – Año III


« Pues Dios, ¿no hará justicia a sus elegidos que le gritan día y noche?»

http://destellos2010.blogspot.com/
PRIMERA LECTURA
Lectura del libro del Éxodo 17, 8-13
En aquellos días, Amalec vino y atacó a los israelitas en Rafidín.
Moisés dijo a Josué:
—«Escoge unos cuantos hombres, haz una salida y ataca a Amalec. Mañana yo estaré en pie en la cima del monte, con el bastón maravilloso de Dios en la mano.»
Hizo Josué lo que le decía Moisés, y atacó a Amalec; mientras Moisés, Aarón y Jur subían a la cima del monte.
Mientras Moisés tenía en alto la mano, vencía Israel; mientras la tenía baja, vencía Amalec. Y, como le pesaban las manos, sus compañeros cogieron una piedra y se la pusieron debajo, para que se sentase; mientras Aarón y Jur le sostenían los brazos, uno a cada lado.
Así sostuvo en alto las manos hasta la puesta del sol.
Josué derrotó a Amalec y a su tropa, a filo de espada.
Palabra de Dios.

MEDITACIÓN
El fragmento que hoy nos ofrece la Primera Lectura pertenece al libro del Éxodo, en cuyo interior descubrimos la liberación de Egipto, el largo peregrinar durante cuarenta años por el desierto y el pacto entre Dios y el Pueblo de Israel en el monte Sinaí, la Alianza.
Después del paso del Mar Rojo y el Cánto de Moisés (Ex 14-15,21) se inicia la sección llamada “Marcha por el desierto” o “Primera etapa en el desierto” (Ex 14,22-18,27). Lograda la libertad Israel pasa a ser un pueblo errante y experimenta la incertidumbre de la libertad, ha de aprender a ser él mismo. Y no es fácil. Pronto descubrirá que la libertad implica confianza y superación de las dificultades: sed, hambre y lucha por la supervivencia, narrado con el maná, las codornices, el agua que brota de la roca y la batalla contra los amalecitas.
Éstos últimos son, según la Biblia, descendientes de Esaú (Gn 36,12) eran un pueblo entregados al pillaje en el desierto del Negueb, si bien el relato los sitúa en el Sinaí.
Ante el peligro Dios ayuda a su pueblo, Moisés se presenta como el intercesor, mientras Josué, dirige al ejército israelita. Esta imagen un autor cristiano de los primeros siglos, Orígenes, descubre a Cristo crucificado que ora en la lucha contra el mal.
También nosotros, en esta batalla sin tregua contra el egoísmo que hay en nuestro interior, contra los amalecitas que atacan el desierto de nuestra vida: el desánimo, el deseo de éxito, poder, dinero, bienes de consumo, el egocentrismo,… y nuestra lucha por un mundo más justo, descubrimos a Cristo, quien no sólo en el momento histórico de la cruz, sino en todo momento, levanta los brazos y ora al Padre para que venzamos en estas duras batallas.
Al comenzar el curso, Cristo va seguir levantando los brazos para que tú y yo, todos podamos vivir los principios de vida junior y la Ley Junior de amarnos como Él nos ama sea una realidad.
También descubrimos en esta imagen a las monjas de clausura y a cuantos a lo largo del día no sólo confían en la fuerza de su inteligencia o sus brazos, sino que elevan el corazón a Dios para que nos ayude a vencer el sufrimiento que hay en el mundo.
SALMO RESPONSORIAL. Sal 120, 1-2. 3-4. 5-6. 7-8 (R/.: 2)

R/. El auxilio me viene del Señor,
que hizo el cielo y la tierra.

Levanto mis ojos a los montes:
¿de dónde me vendrá el auxilio?
El auxilio me viene del Señor,
que hizo el cielo y la tierra. R/.

No permitirá que resbale tu pie,
tu guardián no duerme;
no duerme ni reposa
el guardián de Israel. R/.

El Señor te guarda a su sombra,
está a tu derecha;
de día el sol no te hará daño,
ni la luna de noche. R/.

El Señor te guarda de todo mal,
él guarda tu alma;
el Señor guarda tus entradas y salidas,
ahora y por siempre. R/.
MEDITACIÓN
Con Israel: nos encontramos ante un salmo de peregrinación: a la salida se explora el horizonte para orientarse en buena dirección, hacia el monte Sión, lugar donde se ha levantado el Templo de Jerusalén, luego se inicia la marcha confiando en quien cuida de los caminantes y los protege contra las piedras del camino, los rayos del sol y la luna, los salteadores y los animales peligrosos. El salmo evoca el peregrinar de Israel por el desierto, cuando Dios acompañaba a su pueblo como centinela, nube de día y columna de fuego en la noche.
Con Jesús: Jesús vivió su vida desde la confianza total en el Padre. En su partida de este mundo, el camino de la cruz, su muerte y sepultura, caminó sabiendo que Él cuidaba de su Hijo Amado. Por otra parte es el Pastor que cuida y vela por nosotros.
Con nuestro tiempo: Dios no duerme. Su única tarea, lo único que sabe hacer es amar y cuidar de la Creación y en ella de un modo único y singular de nosotros. Él es mi guardián y por eso camino por la vida con paz y serenidad, sabiendo que hay quien vela contra los enemigos que tratan de apartarme de Él, de impedir que alcance la meta, la Jerusalén del Cielo. Mi vida, tu vida es un levantar los ojos hacia Dios sabiendo que cuida de nosotros y nos protege.
Con los juniors: las marchas forman parte de las actividades de los juniors. Una convivencia, un campamento y en ella trazamos el recorrido, subimos al Montcabrer los mayores o una pequeña ruta. También de noche el camino y la oscuridad se convierten en aliados para provocar en los niños el miedo, es el rastreo. Pero, ¿Por qué ellos a pesar de estar atemorizados avanzan? Sencillamente porque tú vas con ellos y saben que tú proteges las entradas y salidas, en mitad del bosque. Si los abandonases ellos estallarían en llanto y comenzarían a correr sin rumbo. Ellos no te ven, porque es oscuro, pero saben que estás cerca. Así es Dios. Así es nuestra vida en muchas ocasiones.
Carlos G. Vallés. Busco tu Rostro. Sal Terrae.
«El Señor es tu guardián, tu defensa a tu derecha».

Conozco el sentido de esa imagen de la guerra de otros tiempos, Señor. Yo estoy firme con la lanza o la espada en mi diestra, dispuesto a descargar el golpe, mientras mi brazo izquierdo sostiene el largo escudo que protege mi cuerpo. En esa postura quedan defendidos la parte frontal de mi cuerpo y el lado izquierdo, pero el lado derecho queda al descubierto mientras arrojo la lanza o esgrimo la espada en mortal cuerpo a cuerpo. Tú, mi guardián, lo sabes, y por eso te colocas a mi derecha, para proteger con tu escudo lo que yo dejo al descubierto con el mío. Ese es mi flanco vulnerable, el punto débil de mi defensa, y tú me lo cubres. Gracias, Señor, por saber tan bien los peligros de la guerra, los peligros del mundo, por conocer tan bien mis puntos flacos y prestarte a defenderlos con tu presencia. Ahora puedo ir a la guerra.

Tengo debilidades, Señor, y me alegra saber que tú las conoces mejor que yo mismo. Tengo buenas intenciones y buenos deseos, pero también tengo genio y orgullo, pasiones y violencia, y nunca sé lo que haré ante un ataque súbito o una oposición inesperada. Mi flanco derecho está al descubierto, y cualquier flecha enemiga puede hacer blanco en mi cuerpo expuesto. Ponte a mi derecha, Señor, y cúbreme.

Haz que caiga en la cuenta de mis puntos flacos, de las brechas en mis defensas. Abre mis ojos para que vea esos defectos que tengo y que mis amigos conocen a la perfección, y que yo soy el único que no veo. Hazme ver lo que todos ven en mí, lo que tantas veces les molesta de mí sin que yo caiga en la cuenta, lo que todos ellos comentan entre sí sin decírmelo nunca. Ayúdame a tomar nota de mis fallos más frecuentes, para acordarme de ellos; y tú sigue protegiendo en el futuro esas esquinas de mi personalidad que sabes son las más débiles y peor defendidas. Mantén la alerta constante a mi alrededor, Señor, pues siempre me quedan flancos expuestos, y necesito tu escudo que me proteja en los momentos de peligro.
«El Señor te guarda de todo mal, él guarda tu alma; el Señor guarda tus entradas y tus salidas, ahora y por siempre».
Inspirado y tomado de: http://www.mercaba.org/DIESDOMINI/T-O/29C/marco_do_29c.htm
SEGUNDA LECTURA
Lectura de la segunda carta del apóstol san Pablo a Timoteo 3, 14—4, 2

Querido hermano:
Permanece en lo que has aprendido y se te ha confiado, sabiendo de quién lo aprendiste y que desde niño conoces la sagrada Escritura; ella puede darte la sabiduría que, por la fe en Cristo Jesús, conduce a la salvación.
Toda Escritura inspirada por Dios es también útil para enseñar, para reprender, para corregir, para educar en la virtud; así el hombre de Dios estará perfectamente equipado para toda obra buena.
Ante Dios y ante Cristo Jesús, que ha de juzgar a vivos y muertos, te conjuro por su venida en majestad: proclama la palabra, insiste a tiempo y a destiempo, reprende, reprocha, exhorta, con toda paciencia y deseo de instruir.

Palabra de Dios.
MEDITACIÓN:
¿Qué espera Dios del educador junior? ¿Qué se espera del educador? A la segunda pregunta respondemos buscando en los libros del movimiento junior (Rasgos e Identidad, Cridat, campañas, materiales de la JEA,…)la respuesta, a la primera tenemos que encontrarla en primer lugar donde Dios nos expresa lo que desea de cada uno de nosotros, en la Biblia. Y en ella, uno de los libros que iluminan nuestro ser educadores, como bien hemos descubierto, son las cartas a Timoteo y en concreto la segunda, ofrecida por nuestra Madre, la Iglesia, como alimento en la misa dominical. Así pues, invito al lector, a leer en su totalidad la carta y descubrir en ella las exigencias bíblicas de su ser educador. Ciertamente, de este modo, emprenderá el curso con nuevos ánimos.
Centrándonos en el texto de este domingo, el Apóstol, inspirado por Dios nos invita de una forma muy personal a permanecer en lo que hemos aprendido de niños, en las enseñanzas que nuestros padres y catequistas, nos ofrecieron y sobre todo apoyarnos en la Biblia, la Sagrada Escritura. Ella es la sabiduría que conduce a la salvación y a llenar y dar sentido nuestra existencia. Ella es el instrumento para enseñar, reprender, corregir y educar. Y como buenos apóstoles hemos de proclamar, insistir, reprender, reprochar y exhortar.
Pero, con el curso ya en marcha. Imagino habrás programado en tu equipo, pero: ¿cuáles han sido los materiales de los que te has servido para ello? ¿en la formación de los niños a qué libros has recurrido? Enseñar, reprender, corregir, educar, proclamar, insistir, reprochar y exhortar son los verbos con los que educamos en la fe, ¿en ellos qué lugar ocupa la Biblia? ¿Buscamos en ella la sabiduría o más bien, estas son palabras bonitas de un consiliario, pero la realidad es otra, para que el curso funcione hemos de buscar en internet juegos y dinámicas y así que los niños se lo pasen bien? Sinceramente, como centro, ¿cuál es vuestro primer objetivo: educar en la fe o que los niños se diviertan?
Busca la definición de Juniors en el libro Rasgos e Identidad y compara el texto del apóstol Pablo y lo que hacéis en el centro. ¿Cuál de los dos se acerca más a ella?

EVANGELIO
+ Lectura del santo evangelio según san Lucas 18, 1-8

En aquel tiempo, Jesús, para explicar a sus discípulos cómo tenían que orar siempre sin desanimarse, les propuso esta parábola:
— «Había un juez en una ciudad que ni temía a Dios ni le importaban los hombres.
En la misma ciudad había una viuda que solia ir a decirle:
“Hazme justicia frente a mi adversario.”
Por algún tiempo se negó, pero después se dijo:
“Aunque ni temo a Dios ni me importan los hombres, como esta viuda me está fastidiando, le haré justicia, no vaya a acabar pegándome en la cara.”»
Y el Señor añadió:
—«Fijaos en lo que dice el juez injusto; pues Dios, ¿no hará justicia a sus elegidos que le gritan día y noche?; ¿o les dará largas? Os digo que les hará justicia sin tardar. Pero, cuando venga el Hijo del hombre, ¿encontrará esta fe en la tierra?»

Palabra del Señor.

MEDITACIÓN
Durante dos domingos el tema del evangelio va a ser la oración. Para Jesús ésta formaba parte de su vida, Él fue un orante. También nosotros debemos aprender de Él a orar y realmente si queremos saber cuanta fe tenemos un medio es la oración. Al igual que ocurre en una relaci´´on de amor, si la pareja no habla y gusta de estar a solas, unas veces en silencio, otras con gestos, otras sirviéndose de la palabra, pronto el amor se apaga.
Así en el evangelio de esta semana Jesús nos invita a orar con paciencia, orar y esperar. Pues muchas veces creemos que la oración es algo automático, es como ir a la tienda, pedir un productor y recibirlo en seguida. Vivimos tiempos de la inmediatez y sin embargo la oración exige tiempo.
Así Jesús nos ofrece el ejemplo de dos personajes contrapuestos: uno es la viuda, perteneciente a uno de los grupos más desfavorecidos y por tanto preferencial para Dios; el otro es el juez, éste es presentado de modo antitético a la primera, pues no teme ni a Dios ni a los hombres, no es un buen servidor de la sociedad. La mujer a pesar de ello sigue clamando justicia y al final el juez accede.
También nosotros debemos actuar del mismo modo. Orar sin desalentarse. Cada uno de nosotros sabe lo que hay en su interior y alrededor de injusticia. Con la fe puesta en la victoria de Cristo sobre el mal, sobre nuestro pecado y las injusticias, debemos orar, sin desalentarnos. Al igual que el labrador riega el campo, sabiendo que la semilla no germinará después de haber acogido el agua, sino a su debido tiempo.


LOS SANTOS PADRES
Esta parábola nos asegura que Dios escuchará a quienes le dirijan sus oraciones, no con descuido o negligencia sino con constancia y seriedad. ¿Cómo podría –aquel que ama la misericordia y odia la iniquidad, quien siempre extiende su mano hacia aquellos que le aman – no aceptar a quienes se le acercan durante el día y la noche y hacerles justicia como a elegidos suyos?
Cirilo de Alejandría

La iniquidad y la insolencia fueron grandes, aunque todavía fue mayor la oración inoportuna. En efecto, la inoportunidad de la viuda humilló la iniquidad rebelde a Dios y la insolencia arrogante contra los hombres. La voluntad de la viuda las sometió, y así pudo encontrar justicia ante su adversario. La oración inoportuna transformó las dos ramas amargas para que dieran frutos dulces, ajenos a su naturaleza.
Efrén de Nisibi.

Había en una ciudad un juez… Y de los que confían en las veracísimas palabras de Cristo ¿quién no arderá en deseos de orar sin desmayo, ante su invitación: Pedid y se os dará, pues todo el que pide recibe.
Orígenes
De ahí tomó Jesús pie para advertirnos que el Señor, justo y misericordioso, mientras oramos sin interrupción, nos ha de escuchar con absoluta certeza, pues un juez inicuo e impío no pudo resistir la continua insistencia de una viuda.
Agustín

ORACIÓN DESDE LA METODOLOGÍA JUNIOR.

Experiencia:

Contempla imágenes de rascacielos y chavos: entra dentro de las casas, visualiza quienes viven en ellas, sus rostros, sus vestidos, el mobiliario, la vida que llevan allí (sentados a la mesa, comiendo, descansando,…). Durante unos minutos fija tu mirada en ellas, deja que el silencio y la imaginación pinten estas dos casas. ¿Qué te sugieren? ¿Cómo te sientes? ¿Dónde te gustaría vivir?
Reflexión.-
Toma la Biblia y lee el Evangelio de este domingo. ¿Dónde residiría la viuda? En cada una de las viviendas hay personas que oran, ¿cómo sería la oración del que vive en la chabola y del que vive en esta lujosa finca? El pobre reza y espera, el rico quiere resultados. Así pensemos en ejemplo de los mineros de Chile. Su vida ha sido dura, en un trabajo sin las mínimas condiciones laborales, durante los últimos meses han vivido en un infierno y sin embargo no han cesado de orar. Como ocurre con tantas personas que viven en estos lugares. Piensa en tu vida. ¿Cómo es tu oración?

Compromiso.-

Nuestra oración junior es un ejemplo de la constancia. Antes de las actividades las rezamos y comenzamos diciéndole a Jesús “en el comienzo de mi juventud voy hacia ti Jesús, quiero marchar decidido por el camino que tú me marques para que mi vida sea lo que tú esperas de ella,…” Pero la realidad es otra. Rézala desde la actitud del evangelio. Jesús también espera y por tanto no te desanimes aunque Él aún no sea tu mejor amigo, porque en muchas ocasiones es más importante el deporte, el estudio y tus amigos que la reunión del equipo de educadores, la actividad del sábado o la misa dominical.

Celebración:

Reza pausadamente, con las manos abiertas, mirándolas la oración junior.
Oración.

Señor, has venido a traer una buena noticia
a pobres, marginados y vencidos.
Has puesto sus gritos en tu boca,
asumes sus reivindicaciones hasta sufrirlas en tu carne,
y vienes a hacerlas fructificar, y llenarlas de amor,
más allá de sus utopías y de toda esperanza.

Abre nuestros ojos a los que sufren cada día
la estafa, los golpes y las injusticias
del reino del dinero y de la guerra,
y de los poderes que les sirven
en lugar de servir a las personas.

Empapa nuestros corazones de justa cólera.
Haznos lúcidos y responsables.
Quítanos tanta prudencia y miedo.

Danos fuerza y osadía.
Purifica y sostén nuestros compromisos ,
en las acciones sociales y políticas,
para que la dignidad y la fraternidad
no sean palabras engañosas y vacías
para pobres, marginados y vencidos.
Pon en todas nuestras opciones y luchas
generosidad, amor y esperanza.
Que nuestro testimonio siga siendo buena noticia, la tuya,
para quienes Tú más quieres,
tus hijos pobres, marginados y vencidos.
Ulibarri Fl.
GUIÓN CELEBRACIÓN DE LA EUCARISTÍA.
Monición de entrada:
Queridos hermanos y hermanas:
Hoy en esta misa empieza el curso de la catequesis, durante este año vamos a prepararnos los más mayores para la fiesta más bonita de nuestra vida, la Primera Comunión.
Así en esta misa el sacerdote enviará a nuestras catequistas a prepararnos para celebrar la Primera Comunión como Jesús quiere y nosotros vamos a deciros que queremos este año conocer y querer mucho a Jesús.

Señor, ten piedad.
Tú eres nuestro Maestro. Señor, ten piedad.
Tú eres nuestro Amigo. Cristo, ten piedad.
Tú eres nuestro Dios. Señor, ten piedad.

Monición a las lecturas.
Las lecturas son un momento muy especial en la misa. En ellas Dios nos habla. Así pues estemos muy atentos.

Monición evangelio.
Y ahora vamos a escuchar el Evangelio, es uno de los momentos más importantes de la misa, por eso lo lee el sacerdote y nos cuenta como era Jesús, lo que Él hacía y nos enseñaba. Estemos más atentos.

Homilía. Les explicamos el dibujo de fano, lo encontraréis en http://www.diocesismalaga.es/index.php?mod=imagenes&secc=ver&id=./images/albumes/fano/20101017.jpg . Para ello lo recortamos en cuatro partes, las cuales encerramos en cuatro sobres con estas frases: Había un juez que no se portaba bien con las personas – Había una viuda que quería le ayudase – Él no quería ayudarle – pero tanto le molestaba que al final le escuchó y le ayudó. Ellos tiene que buscar los sobres, escondidos en los altares y completar la frase. Después les pedimos que los abran y descubran la enseñanza que esconden, completando el puzle, que colocan en un panel de corcho y ellos mismos la explican.



Peticiones.-

Por la Iglesia, para que escuchemos sus enseñanzas. Roguemos al Señor.
Por los gobernantes, para que no quiten el dinero que necesitan las escuelas. Roguemos al Señor.
Por los niños que sufren la guerra, para que puedan jugar e ir a la escuela en paz. Roguemos al Señor.
Por las catequistas, para que se sientan muy queridas por nosotrs. Roguemos al Señor.
Por nuestros padres, para que no les falte trabajo y nos hablen de Jesús. Roguemos al Señor.
Por nosotros, para que estemos atentos a lo que las catequistas nos van a enseñar. Roguemos al Señor.
Por las personas que otros años ayudaron a la parroquia en la catequesis y ya se han ido de este mundo. Roguemos al Señor.

Monición.-

Queridos hermanos:
Hoy es un día muy especial para nuestras catequistas, porque el sacerdote, en nombre de todos nosotros, la comunidad parroquial de N. va a darles delante de nosotros una tarea muy importante: prepararnos para la Primera Comunión.

Profesión de fe.-

Sacerdote:
Queridas catequistas, con el gesto que vais a realizar ahora expresáis vuestra pertenencia a la Iglesia y deseo de enseñar la fe de la Iglesia. Por eso os pregunto:

¿Creéis en Dios, Padre Santo y bueno?,
-Sí, creo.

¿Creéis en Jesucristo, el Hijo de Dios, que es la Palabra del Padre que hace brotar en nosotros nuestra palabra?
-Sí, creo.

¿Creéis en el Espíritu Santo, os muestra caminos para llegar al corazón de quienes le buscan?
-Sí, creo.

¿Creéis en la Iglesia, es la comunidad a la que sois llamados como catequistas.
Sí, creo.

¿Estáis dispuestos, con la ayuda de Dios a transmitir la fe de la Iglesia viviéndola vosotros primero y presentándola a los niños y adolescentes como camino seguro de felicidad?
-Sí, estoy dispuesto con la ayuda de Dios.

La comunidad os acoge y os envía como catequistas durante este curso. La comunidad confía en vosotros y os apoyará con su plegaria y oración, con su ejemplo y con su testimonio.


Entrega de la cruz.-
N. recibe la cruz, signo de la entrega de Cristo por nosotros. Que la sabiduría de la cruz esté cada domingo en tu corazón y en tus labios. Y que toda tu vida sea un signo del amor de Cristo manifestado en la cruz.

Rito de la inscripción:
Los niños plantan en una maceta un árbol. Seguidamente escriben en pegatinas su nombre y lo pegan a la maceta.

Oración de un niño:
Jesús,
hoy hemos empezado la catequesis
y los niños estamos muy contentos,
porque vamos a conocerte
y a intentar ser tus mejores amigos.
Como el árbol que hemos plantado
queremos ser así,
verde y lleno de vida,
capaz de recibir la tierra de la misa
y el agua de las enseñanzas de las catequistas.
Jesús ayúdanos
a cuidar de nuestra fe
y no dejar que se seque.

ORACIÓN-FORMACIÓN PREVIA A LA REUNIÓN DE MONITORES.
Este año nuestros monitores tienen la fortuna de tener un buen libro, el Cridat, lo ideal es que ellos en sus casas sigan personalmente el texto. De este modo la oración-formación semanal servirá para compartir y ayudarles en la lectura del libro. Quienes no lo posean lo encontrarán en : http://www.wix.com/webjuniorsmdcridat/cridat .

Ambientación: colocamos la cruz de San Damián, un icono de la Virgen María, una vela encendida y una Biblia, la disposición dependerá del lugar donde se realice.

Lectura de la Palabra: Exodo 3, 1-5

Dios te llama… Siente que Él te convoca en este momento, aunque no sepas a qué…

Nos quitamos el zapato. Notamos el cambio. Sentimos el frío y las plantas en contacto directo con el suelo. ¿Cómo nos sentimos?

Recuerda las palabras de Dios: el lugar que pisas es sagrado… Siente la presencia de Dios que entra por los pies.

Ahora este lugar no es el salón de la parroquia, la sala de reuniones del centro junior. Al igual que ocurrió en el Sinaí, el monte dejó de ser lugar de pasto de las ovejas para convertirse en un espacio distinto.

Es distinto, sólo porque Dios está ahora y aquí con nosotros… ¿Qué actitud sentimos ante Él? ¿Confianza, respeto, miedo, abandono?

Adoramos en silencio y reconocemos lo importante que es Él en nuestra vida. Sentimos su grandea y su pequeñez.

Compartimos: ¿cómo nos hemos sentido? ¿Al comenzar el curso lo vemos ahora de otro modo, sintiéndonos llamados por Dios?


Para la próxima reunión: leemos del Cridat la pg. 13. En una libreta anotamos las frases que más me han llamado la atención y las que no comprenda. En permanente subrayamos la que más me ha impactado. También podemos relacionarlo con el texto meditado: ¿cuál de ellas expresa lo que vivió Moisés?
JÓVENES EJEMPLARES:
Beato Isidoro Bakanja (12 de Agosto)
El continente africano ha cautivado a los Juniors gracias al Proyecto Togo y es en el África subsahariana donde derramó su sangre este joven.
Hacia 1885, en el poblado de Boangi (Congo) nació Isidoro Bakanja. Sus padres, Yonzwa y Inyunka no eran cristianos. Y además de dar a luz a este niño ofrecen al mundo otro niño y una niña.
Hacia 1905 el joven cuenta con veinte años y es contratado como peón albañil, por una emrpesa de obras públicas de Mbandaka. Allí comienza a prepararse para recibir el bautismo mediante el catecumenado que le ofrecen los monjes trapenses.
El 6 de Mayo de 1906 recibe el bautismo. Lo primero que realiza nada más ser cristiano es acoger el escapulario de Nuestra Señora del Carmen, como signo del gran amor que siente hacia María, la Madre de Dios. Unos meses después, el 25 de noviembre recibe la confirmación y un año más tarde, el 8 de Agosto de 1607, a los 23 años la Primera Comunión.
Para alcanzar esta meta se ha formado con el librito del catecismo redactado por los padres trapenses. En él indica los siguientes signos como identificativos del ser cristiano: llevar un escapulario de la Virgen María y el rosario, mostrar su fe ante los otros.
Y así va a vivir quien es un joven de carácter muy dulce, afable con todos, blancos y negros, incapaz de discutir y llevando una vida de oración continua.
Concluído el contrato de tres años en la empresa de obras públicas, entra a trabajar en una de caucho, donde el gerente, un belga blanco, odia a todo lo cristiano, prohibiéndole que rece y lleve signos externos .
Un día mientras sirve a la mesa del gerente, éste advierte el escapulario en su cuello y le obliga a quitárselo. Él no acepta.
Algunos días mas tarde, durante el desayuno de nuevo le obliga a quitarselo y ante la negativa manda le den 25 azotes. Él soporta en silencio el terrible castigo.
Bakanja continua en su trabajo y es elegido como catequista. Realiza sus ejercicios piadosos (oración diaria, rosario, sacramento del eprdón y comunión frecuente) y el apostolado entre sus compañeros. Mientras Longange, el gerente, aumenta el odio hacia él. En febrero de 1909 ordena sea castigado con veinticinco golpes de cachiporra por haberse negado a quitarse el escapulario. Él sufre. Un día al enterarse de la decisión de matarle le pregunta al gerente el motivo. La respuesta es rotunda. Manda a un compañero negro que le azote con un latigo para domar a los elefantes, lleno de clavos. Su compañero se niega. Es entonces cuando Longange arranca el escapulario y lo tiera a su perro, mientras él le golpea con las botas y el latigo, dejándolo casi muerto. “Blanco, estoy muriendo… piedad… Mamá, me muero”.
Para mayor desgracia, llega un inspector de la empresa y temiendo el gerente lo sepa manda encerrarlo en un calabozo donde le torturan las ratas y los golpes de éste. Un día dejan la puerta abierta y logra escapar, salvando la vida.
Teniendo conocimiento de ello Longange ordena que Bakanja sea tendido en el suelo y vuelve a azotarle con el latigo de los elefantes, sin embargo no muere y es encarcelado en un calabozo. Allí le ata ambos pies con dos argollas metálicas cerradas con candado y unidas a un enorme peso. Afortunadamente el anuncio de la visita de un inspector le libera de este lugar, si bien había recibido doscientos golpes. De nuevo consigue escaparse, deslizándose en la orilla del pantano. Lleno de pus y de gusanos agoniza. El 24 al 25 de Julio recibe la visita de los misioneros y recibe los sacramentos. El sacerdote le pide que perdone a su verdugo, él responde: No estoy enojado contra el blanco, el que me haya flagelado es asunto suyo, no mío. Si, si muero, pediré por él en el cielo.
Durante la mañana del domingo 15 de agosto de 1909 muere. El 25 de Abril de 1995 Juan Pablo II lo beatifica.

jueves, 7 de octubre de 2010

Domingo 28. 10 de Octubre de 2010.


PRIMERA LECTURA
Lectura del segundo libro de los Reyes 5, 14-17
En aquellos días, Naamán de Siria bajó al Jordán y se bañó siete veces, como había ordenado el profeta Eliseo, y su carne quedó limpia de la lepra, como la de un niño.
Volvió con su comitiva y se presentó al profeta, diciendo:
— «Ahora reconozco que no hay dios en toda la tierra más que el de Israel. Acepta un regalo de tu servidor.»
Eliseo contestó:
— «¡Vive Dios, a quien sirvo! No aceptaré nada.»
Y aunque le insistía, lo rehusó.
Naamán dijo:
— «Entonces, que a tu servidor le dejen llevar tierra, la carga de un par de mulas; porque en adelante tu servidor no ofrecerá holocaustos ni sacrificios a otros dioses fuera del Señor.»
Palabra de Dios.
MEDITACIÓN
Los dos libros de los Reyes es la continuación de los dos de Samuel, narrándonos la historia del reinado de Salomón (970-931 a.C.), la división del reino en Israel y Judá (931) y los monarcas que se suceden en ambos reinos hasta la caída de Samaría bajo el poder Asirio (722 a.C.) y Jerusalén bajo el dominio babilónico (587 a.C.) a los que se suman dos breves apéndices. Todo ello leído desde la Alianza, es decir, la fidelidad e infidelidad a Dios y sus preceptos, puesta de manifiesto por los profetas (Elías y Eliseo particularmente) cuya vida se entrecruza con la de los monarcas.
En concreto el fragmento proclamado este domingo pertenece al Ciclo de Eliseo, el discípulo fiel y sucesor de Elías, jefe de un grupo de profetas, quienes llevan una vida fiel a Dios. Así la sección a la que pertenece el fragmento (2 Re 4, 1-8,15) nos presenta diez historias donde el lector descubre los poderes extraordinarios de Eliseo. La segunda de ellas nos narra el milagro a Naamán, un alto dignatario del reino vecino, enemigo e infiel, en cuanto adora otros dioses, quien ha sufrido una enfermedad de la piel (posiblemente no sea lepra, según la Biblia de Jerusalén, pues entonces estaría apartado de la vida social), dirigiéndose a Eliseo. Éste sin recibirle le ofrece el medio para sanarse: bañarse siete veces en las aguas del Jordán. Así lo realiza y es curado, reconociendo a Yahvé como su Dios y adorándole.
De este modo un extranjero que no creía en el auténtico Dios, experimenta la enfermedad, busca al profeta, sana y se convierte a Yahvé.
Nosotros también somos ese enfermo que ha experimentado en numerosas ocasiones el poder sanador de Dios, cuando sentíamos por el pecado vergüenza de nuestra persona o necesitábamos de su ayuda. Pero, ¿se lo agradecimos? A lo largo de este domingo las lecturas van a insistirnos en ello.
Somos educadores y como Eliseo vivimos en una sociedad donde Dios cada vez tiene menos cabida. Los protagonistas de todas las emisoras de radio y televisión son quienes adoran al dinero, el éxito y el poder (acaudalados empresarios, “famosillas y famosillos”, futbolistas, políticos,…). Frente a ellos nos encontramos los juniors, como el profeta aceptamos a Jesucristo y tratamos de vivir el Evangelio, adorando al Padre y no dejándonos cautivar por ídolos de este mundo. Nuestra misión es estar ahí, acoger a quienes en un momento determinado experimentan el vacío de sus vidas y ofrecerles las aguas de la Palabra de Dios, del Bautismo, la Reconciliación y la Eucaristía para que sanen y descubran en Dios al único que nos limpia de nuestras miserias y heridas. Pero, ¿realmente lo somos? ¿estamos convencidos de ello?
Como dinámica puedes tomar una foto de un famoso: ¿En el fondo en qué te pareces a Él? Toma en tus manos una cruz y contémplala y pídele que te cure.
SALMO RESPONSORIAL. Sal 97, 1. 2-3ab. 3cd-4 (R/.: cf. 2b)

R/. El Señor revela a las naciones su salvación.

Cantad al Señor un cántico nuevo,
porque ha hecho maravillas:
su diestra le ha dado la victoria,
su santo brazo. R/.

El Señor da a conocer su victoria,
revela a las naciones su justicia:
se acordó de su misericordia y su fidelidad
en favor de la casa de Israel. R/.

Los confines de la tierra han contemplado
la victoria de nuestro Dios.
Aclama al Señor, tierra entera,
gritad, vitoread, tocad. R/.

MEDITACIÓN
Con Israel: el salmo con el que este domingo respondemos a la Primera Lectura pertenece a los llamados “salmos del reino”, cantado una vez al año durante las fiestas de las Tiendas. En ellas Israel recordaba los cuarenta años de éxodo por el desierto, construyendo con ramajes tiendas y festejando a quien en aquel peregrinar era el rey que acompañaba y dirigía a su pueblo, conduciéndolo a la victoria.
Con Jesús: Jesús como buen israelita cantó este salmo cuando con su familia, vecinos o apóstoles subía a Jerusalén a celebrar esta fiesta, impregnándose de los sentimientos que lo envuelven y descubriéndose a sí mismo como Señor que vence al pecado mediante la muerte y resurrección.
Con nuestro tiempo: el pesimismo, máxime en estos años de crisis, se está adueñando de nuestra sociedad. Necesitamos volver la mirada a Dios, Él va a vencer, la última palabra no la tiene la injusticia que comete el Norte contra el Sur, la corrupción de quienes amparándose en los años de bonanza se hicieron ricos especulando con uno de los derechos fundamentales de toda persona, el derecho a una vivienda digna. La esperanza es la gran oferta de los cristianos. A pesar de ello, confiemos en Él, celebremos anticipadamente la victoria segura.
Con los juniors: ¿cómo presentamos a Dios a nuestros niños? El salmo constituye una buena oportunidad para, al comenzar el curso, recordando el campamento, donde Dios acampó con nosotros y nos guió durante unos días por el desierto, fuera de nuestro ambiente. Dios ha estado ahí con nosotros. Allí hemos contemplado su amor y hemos experimentado que Dios se ha acordado de su misericordia y fidelidad a favor de nuestro centro junior. Es un buen momento, comenzar el curso recitando este salmo.




Carlos G. Vallés. Busco tu Rostro. Sal Terrae.
EI Señor da a conocer su victoria, revela a las naciones su justicia
Creo en tu victoria, Señor, como si ya hubiera llegado, y lucho por ella en el campo de batalla como si aun hubiera que ganarla con tu poder y mi esfuerzo a tu lado. Esa es la paradoja de mi vida: tensión a veces, y certeza siempre. Tú has proclamado tu victoria ante el mundo entero, y yo creo en tu palabra con confianza absoluta, contra todo ataque y toda duda. Tu eres el Señor, y tuya es la victoria. Sin embargo, Señor, tu tan anunciada victoria no se deja ver todavía, y mi fe está a prueba. Ese es mi tormento.
Proclamo la victoria con los labios y lucho con las manos para que venga. Celebro el triunfo y me esfuerzo por que suceda. Creo en el futuro y sudo en el presente. Me regocijo cuando pienso en el ultimo día y me echo a temblar cuando me enfrento a la tarea del día de hoy. Sé que pertenezco a un ejercito victorioso, que al final, acabará por derrotar a toda oposición y conquistar todo el mundo; pero caigo en el campo de batalla con sangre en el cuerpo y desencanto en el alma. Soy soldado herido de un ejército triunfador. Mío es el triunfo y mías las heridas. Piensa en mí, Señor, cuando anuncies tus victorias.
Robustece mi fe y abre mis ojos para hacerme ver que tu victoria ya ha llegado, aunque quede velada bajo apariencias humildes que ocultan la gloria de toda realidad celestial mientras seguimos en la tierra. Tu victoria ha llegado porque tú has llegado; tú has andado los caminos del hombre y has hablado su lengua; tú has gustado su miseria y has llevado a cabo su redención; tú has hallado la muerte y has restaurado la vida. Sé todo eso, y ahora quiero hacerlo realidad en mi vida para que yo mismo viva esa fe y todos sean testigos. Hazme gustar la victoria en el alma para que pueda proclamarla con los labios.
Entre tanto, gozo viendo en sueño y profecía la victoria final que te devolverá la tierra entera a ti que la creaste. Entonces todos lo verán y todos entenderán; la humanidad se unirá, y todos los hombres reconocerán tu majestad y aceptarán tu amor. Ese día es ya mío, Señor, en fe y esperanza.
Los confines de la tierra han contemplado la victoria de nuestro Dios.
Inspirado y tomado de: http://www.mercaba.org/DIESDOMINI/T-O/27C/marco_do_27c.htm
SEGUNDA LECTURA
Lectura de la segunda carta del apóstol san Pablo a Timoteo 2, 8-13
Querido hermano:
Haz memoria de Jesucristo. resucitado de entre los muertos, nacido del linaje de David.
Éste ha sido mi Evangelio, por el que sufro hasta llevar cadenas, como un malhechor; pero la palabra de Dios no está encadenada:
Por eso lo aguanto todo por los elegidos, para que ellos también alcancen la salvación, lograda por Cristo Jesús, con la gloria eterna.
Es doctrina segura: Si morimos con él, viviremos con él. Si perseveramos, reinaremos con él. Si lo negamos, también él nos negará. Si somos infieles, él permanece fiel, porque no puede negarse a sí mismo.
Palabra de Dios.
MEDITACIÓN:
Seguimos con el escrito de la pasada semana, en él la exhortación se hace más personal y animada, ofreciéndonos el Apóstol el ejemplo de quien en la cárcel se prepara para morir por Cristo y escribe estas letras a su fiel compañero y hombre de confianza. Los tiempos impetuosos en los que Pablo ha fundado comunidades, recordemos el libro de los Hechos de los Apóstoles, dan lugar a una nueva etapa en la que se han de consolidar y mantener las comunidades fundadas en la tradición y las enseñanzas recibidas de los apóstoles, el llamado “depósito de la fe” y para ello, máxime cuando muchos de quienes vivieron con Jesús han muerto, ante la tercera generación cristiana (apóstoles, discípulos de los apóstoles fueron la primera y segunda) hay que formar líderes responsables, competentes y de confianza que sepan mantener vivo el mensaje de Jesús.
Uno de ellos es Timoteo. A él dirige el Apóstol estas enseñanzas en la que le exhorta a tener siempre presente a Jesucristo. Y confieso en la peregrinación junior a Roma uno de los momentos más intensos fue la contemplación de la tumba del Apóstol y las cadenas, las cuales hacen referencia a este texto. Pablo es el apóstol que las sufre por el Evangelio.
Así pues, te propongo leer toda la carta, apenas son cinco páginas y tratar de aplicártelas a tu vida como educador. Descubrir el modelo de educador que Pablo propone, el cual, en cuanto se halla en la Biblia, es lo que a ti, que has sido llamado por el colaborador de los sucesores de los apóstoles, es decir, el consiliario, Dios espera. Conflictos, problemas, falsos doctores, ideas raras,… los hubo en tiempos de Pablo y los hay ahora, pero también Dios sigue iluminándonos con su Palabra.
Otro medio para orar la Palabra es contemplar las cadenas de Pablo y orar desde ellas: ¿estoy encadenado a Cristo o a mis intereses? Sentir gozo por sufrir por el Evangelio, ser junior.
http://www.annopaolino.org/interno.asp?lang=spa&id=13&id_dettaglio=193884
EVANGELIO
+ Lectura del santo evangelio según san Lucas 17, 11-19
Yendo Jesús camino de Jerusalén, pasaba entre Samaria y Galilea. Cuando iba a entrar en un pueblo, vinieron a su encuentro diez leprosos, que se pararon a lo lejos y a gritos le decían:
— «Jesús, maestro, ten compasión de nosotros.»
Al verlos, les dijo:
— «Id a presentaros a los sacerdotes.»
Y, mientras iban de camino, quedaron limpios. Uno de ellos, viendo que estaba curado, se volvió alabando a Dios a grandes gritos y se echó por tierra a los pies de Jesús, dándole gracias.
Éste era un samaritano.
Jesús tomó la palabra y dijo:
— «¿No han quedado limpios los diez?; los otros nueve, ¿dónde están? ¿No ha vuelto más que este extranjero para dar gloria a Dios?»
Y le dijo:
— «Levántate, vete; tu fe te ha salvado.»
Palabra del Señor.
MEDITACIÓN
Recordará el lector nos hallamos en la parte cuarta parte del evangelio de San Lucas, llamada Viaje a Jerusalén (Lucas 9, 51-19,28) y dentro de ella, la tercera sección (17,11-19,28), en la que plantea el fin del mundo y juicio, el acceso al Reino y la condición mesiánica de Jesús.
Y este domingo nos presenta la curación de los diez leprosos. Esta enfermedad conllevaba la ruptura de la persona en todas sus dimensiones: su cuerpo quedaba infectado de úlceras, el miedo al contagio les llevaba a abandonar la familia y el pueblo y por otra parte, al ser considerada castigo por el pecado cometido eran considerados pecadores y excluidos del culto. Por este motivo el sacerdote tenía la función comprobar la curación e integrarlo en una sociedad donde la religión era fundamental y regía las normas y vidas sociales.
Pero en este evangelio el acento no se sitúa tanto en la enfermedad y milagro, cuanto en la actitud agradecida de uno de ellos. De diez solamente uno vuelve a Jesús, es decir, le confiesa como Señor, alabando su poder. Y éste es samaritano, p erteneciente a un pueblo excluido por Israel, pues adoraba a Dios en un lugar distinto a Jerusalén.
El episodio nos invita a revisar nuestra relación con Dios, ¿es ésta de agradecimiento o solamente recurrimos a Él para pedirle?, a descubrir en el samaritano a nosotros, los juniors. Pues en el presente Dios sigue actuando y curando a las personas, pero éstas se olvidan de agradecerle sus beneficios. Nosotros, sin embargo, a través de la eucaristía, es decir, la acción de gracias, y en nombre de toda la sociedad agradecemos a Dios sus dones. También nos invita a descubrir la salvación abierta a todos y tener una mirada evangélica, sin prejuicios hacia los inmigrantes. El samaritano bien podría ser un búlgaro o rumano que cree en Jesucristo pero no reconoce al Papa como Pastor de la Iglesia, al igual que ellos no reconocían al Sumo Sacerdote.
ORACIÓN DESDE LA METODOLOGÍA JUNIOR.

Experiencia:
Busco una cajita, tomo folios y los corto en cuartillas. En ellas escribo todo lo que he recibido en mis años de vida (familia, trabajo, amigos, parroquia-juniors, problemas que se solucionaron, éxitos logrados, fracasos superados, momentos inolvidables,…). Los coloco dentro de la caja y la envuelvo en papel de regalo. En ella escribo: Remite: tu Papá Dios. Destinatario: mi nombre. La dejo en un lugar cercano. Me siento. Me levanto, lo tomo como si fuese ahora otra persona que ha recibido este regalo.

Reflexión.-

Leo el Evangelio, tomando la Biblia, es decir, el gran regalo que Dios nos hace cada día. Invoco a Dios para que ilumine. Tras la lectura puedo volver a leerla mediante los powerpoint de las monjas benedictinas de Montserrat (http://www.benedictinescat.com/Montserrat/eucarcast.html ) en silencio, pausadamente. Ilumino la experiencia con la luz del Evangelio: ¿de todas ellas cuáles han sido motivo para darle gracias a Dios?

Compromiso.-

Tomo las cuartillas, las leo, detrás escribo: “gracias Papá”, las coloco dentro de un sobre y escribo el remitente (mi nombre) y el destinatario (Papá Dios). Un compromiso a partir de ahora puede ser comprarme una libreta, escribir en la cubierta (Gracias) e ir anotando cada día antes de acostarme, a modo de diario los motivos por los que en ese día le doy gracias a Dios.

Celebración:

Éste sobre lo puedo llevar a la parroquia y, después de hablar y pedirle permiso al párroco, depositarlo ante el sagrario o una imagen religioso, arrodillándome y rezando la oración que brote espontáneamente de mi corazón.
Puedo escuchar la canción de Violeta Parra, Gracias a la vida, vida que es un regalo de Dios, de la web “Voces unidas por Chile”:
http://www.vocesunidasporchile.com/


Oración.


Gracias a Dios que me ha dado tanto.
Me dio dos luceros que, cuando los abro,
perfecto distingo lo negro del blanco,
y en el alto cielo su fondo estrellado
y en las multitudes el hombre que yo amo.

Gracias a Dios que me ha dado tanto.
Me ha dado el oído que, en todo su ancho,
graba noche y día grillos y canarios;
martillos, turbinas, ladridos, chubascos,
y la voz tan tierna de mi bien amado.

Gracias a Dios que me ha dado tanto.
Me ha dado el sonido y el abecedario,
con él las palabras que pienso y declaro:
madre, amigo, hermano, y luz alumbrando
la ruta del alma del que estoy amando.

Gracias a Dios que me ha dado tanto.
Me ha dado la marcha de mis pies cansados;
con ellos anduve ciudades y charcos,
playas y desiertos, montañas y llanos,
y la casa tuya, tu calle y tu patio.

Gracias a Dios que me ha dado tanto.
Me dio el corazón que agita su marco
cuando miro el fruto del cerebro humano;
cuando miro el bueno tan lejos del malo,
cuando miro el fondo de tus ojos claros.

Gracias a Dios que me ha dado tanto.
Me ha dado la risa y me ha dado el llanto.
Así yo distingo dicha de quebranto,
los dos materiales que forman mi canto,
y el canto de ustedes que es el mismo canto
y el canto de todos, que es mi propio canto.

Gracias a Dios que me ha dado tanto.


GUIÓN CELEBRACIÓN DE LA EUCARISTÍA.
Monición de entrada:
Queridos hermanos y hermanas:
Todos los domingos nos reunimos en misa para celebrar la eucaristía. Ésta palabra pertenece a otro idioma y significa acción de gracias, pues cada vez que celebramos la misa le damos gracias a Dios por la vida, las personas que nos quieren, el cielo, el pueblo tan precioso que tenemos y por todas las cosas buenas.
Hoy además vamos a darle gracias por unas personas muy especiales, son las catequistas de la parroquia. Ellas van a ayudarnos a conocer y querer mucho a Jesús y hoy van a ser enviadas para ser nuestras catequistas.

Señor, ten piedad.
Porque siempre estás con nosotros. Señor, ten piedad.
Porque nos quieres con nuestros defectos. Cristo, ten piedad.
Porque nos ayudas a ser muy felices. Señor, ten piedad.

Monición a las lecturas.
En la primera lectura vamos a conocer la historia de un personaje muy importante que fue a visitar al profeta Eliseo. Estemos atentos a ver porque fue. Y en la segunda san Pablo nos dirá como hemos de ser buenos cristianos y a las catequistas les enseñará a ser buenas catequistas.

Monición evangelio.
Hola: uf, que piel más limpia que tengo. Que manos más blancas y bonitas. Ah, perdonad, no me he presentado. Yo soy uno de los leprosos que Jesús curó, pero no era el único. Habían otros. ¿Qué dónde están? Pues no lo se. ¿Qué qué les pasó? Mirad, mejor que os lo cuente el sacerdote.

Homilía. entregamos a los monaguillos una bolsita de chucherías. Y seguimos la misa explicando la primera lectura. Cuando terminemos les preguntamos que han hecho y en qué se parecen a los diez leprosos. Si ellos han dado las gracias les felicitamos. Y finalmente les explicamos como Dios siempre nos da muchas cosas y nosotros unas veces hacemos como ellos y otras, no le damos las gracias.



Peticiones.-

Por la Iglesia, para que se sienta querida por sus hijos, que somos nosotros. Roguemos al Señor.
Por los gobernantes, para que no disminuyan el dinero que destinan a curar a los enfermos. Roguemos al Señor.
Por los países donde aún hay leprosos, para que les ayuden y consigan acabar con esta enfermedad, como ha pasado en nuestro país. Roguemos al Señor.
Por las catequistas, para que Jesús les ayude en la tarea de enseñarnos a quererle mucho. Roguemos al Señor.
Por nuestros padres, para que ayuden a la parroquia en la tarea de educarnos en la fe. Roguemos al Señor.
Por nosotros, para que nos portemos bien con las catequistas. Roguemos al Señor.
Por nuestra parroquia, para que todos al venir a misa sientan que Dios los quiere y nadie se sienta rechazado en misa. Roguemos al Señor.

Monición.-

Queridos hermanos:
Hoy es un día muy especial para nuestras catequistas, porque el sacerdote, en nombre de todos nosotros, la comunidad parroquial de N. va a darles delante de nosotros una tarea muy importante: prepararnos para la Primera Comunión.

Profesión de fe.-

Sacerdote:
Queridas catequistas, con el gesto que vais a realizar ahora expresáis vuestra pertenencia a la Iglesia y deseo de enseñar la fe de la Iglesia. Por eso os pregunto:

¿Creéis en Dios, Padre Santo y bueno,
que se sirve de hombres y mujeres sencillos para anunciar y llevar a cabo el Plan de Salvación,
que os ha llamado para mostrar a la Comunidad Parroquial el rostro de su Hijo Jesús,
que a pesar de vuestra fragilidad os llama a colaborar con Él para que el Reino se haga realidad aquí y ahora
y os da fuerza para la tarea que os confía.
-Sí, creo.

¿Creéis en Jesucristo, el Hijo de Dios,
que se ha entregado por nosotros hasta la muerte,
que está vivo,
que sólo en su nombre podemos ser salvos,
que es la Palabra del Padre que hace brotar en nosotros nuestra palabra.
-Sí, creo.

¿Creéis en el Espíritu Santo,
que vive con el Padre y el Hijo,
que os enseña lo que no sabéis,
os da fuerza para expresar las palabras y los gestos de Jesús,
está a la obra y no os deja solos en el empeño de anunciar el Reino,
es vuestra fuerza en el cansancio y en la incertidumbre,
os muestra caminos para llegar al corazón de quienes le buscan.
-Sí, creo.

¿Creéis en la Iglesia,
que es nuestra Madre,
es el signo de Dios para los hombres y mujeres de hoy,
es a la vez santa y pecadora,
es la Iglesia de Jesús a la que os incorporasteis por el Bautismo
es la comunidad a la que sois llamados como catequistas.
Sí, creo.

¿Estáis dispuestos, con la ayuda de Dios a
colaborar en la vida de nuestra comunidad cristiana, en el anuncio de la Palabra,
y a transmitir la fe de la Iglesia viviéndola vosotros primero y presentándola a los niños y adolescentes como camino seguro de felicidad.
-Sí, estoy dispuesto con la ayuda de Dios.

La comunidad os acoge y os envía como catequistas durante este curso. La comunidad confía en vosotros y os apoyará con su plegaria y oración, con su ejemplo y con su testimonio.


Entrega de la cruz.-
N. recibe la cruz, signo de la entrega de Cristo por nosotros. Que la sabiduría de la cruz esté cada domingo en tu corazón y en tus labios. Y que toda tu vida sea un signo del amor de Cristo manifestado en la cruz.

Oración de una catequista, antes de concluir la misa..-
Señor,
este curso que estamos iniciando,
no es un eslabón perdido,
sino un paso más en el camino
de ser persona y creyente.
Abre el corazón,
de quienes formamos
el equipo de catequistas,
a la esperanza.
Es la hora de sembrar,
de mirar hacia delante,
desde la debilidad de nuestras fuerzas
pero contando con tu ayuda
y la que es Madre y Catequista,
María Santísima.


JÓVENES EJEMPLARES:
Venerable María del Carmen González-Valerio
Sorprende la edad de esta niña. El 14 de Marzo de 1930 nace en Madrid, siendo bautizada sin demora debido a la debilidad de su cuerpecillo. Dos años después recibe el sacramento de la confirmación. Y a los seis años la Primera Comunión.
Siendo de familia acomodada en una ocasión llamó a la puerta un pobre y le entregó todos sus ahorros, pidiéndole volviese a llamar para que su madre le diese otra cosa. También el dinero que le daban los abuelos para comprarse juguetes se los daba a la criada para que se los comprase a sus hijas.
A los cuatro o cinco años de edad le gusta dirigir el rosario en la familia y recita de memoria las letanías y tiene gran devoción al Sagrado Corazón de Jesús.
Sin embargo su infancia no es feliz. Al igual que ocurrió con tantos niños y niñas nacidos en esos años sufrió la desolación de la guerra. Así en agosto de 1936 su padre es asesinado, refugiándose su madre en la embajada de Bélgica, mientras ella y sus hermanos son acogidos por una de sus tías. En 1937 ante el peligro de ser llevados a la antigua URSS con el grupo de niños que iban a ser conducidos a este país, los hermanos son acogidos en la embajada.
La niña perdona y reza por la salvación de los asesinos de su padre.
El 6 de abril de 1939 empieza el calvario para Mari Carmen, viéndose obligada a guardar cama. Lo que era una otitis degenera en septicemia o infección de la sangre. El 27 de Mayo es operada. Días después le administran más de veinte inyecciones, aumentando el sufrimiento, que le obliga a tomar una especie de purés de bellotas. La enfermedad avanza. A ella se une una doble flebitis que la llena de llagas. Solamente el nombre de Jesús le conforta. Y cuando su madre le pide rece para que Jesús la cure, ella responde: -No, mamá, yo no pido eso; pido que se haga su voluntad.
Había anunciado que moriría el 16 de Julio, fiesta de N.S. del Carmen y día de su santo, pero al enterarse de que su tía Sofía se casaba ese día, anuncia que no moriría hasta el día siguiente. Y así a las 15 horas le dice al médico: -¡Déjeme, doctor, déjeme ir ya! ¿No ve que viene la Virgen con los ángeles a buscarme?
Y ante el asombro de todos junta las manitas y reza:
-Jesús, José y María, asistidme en mi última agonía; Jesús, José y María, haced que cuando muera, expire en paz y con Vos el alma mía”.
Incorporándose un poco cae sobre su almohada y en paz entrega su espíritu.
El 12 de Enero de 1996 el Papa Juan Pablo II la declaró Venerable.

viernes, 1 de octubre de 2010

Domingo 27. 3 de Octubre de 2010.


PRIMERA LECTURA
Lectura de la profecía de Habacuc 1, 2-3: 2, 2-4

¿Hasta cuándo clamaré, Señor,
sin que me escuches?
¿Te gritaré: «Violencia»,
sin que me salves?

¿Por qué me haces ver desgracias,
me muestras trabajos, violencias y catástrofes,
surgen luchas, se alzan contiendas?

El Señor me respondió así:
«Escribe la visión, grábala en tablillas,
de modo que se lea de corrido.

La visión espera su momento,
se acerca su término y no fallará;
si tarda, espera,
porque ha de llegar sin retrasarse.

El injusto tiene el alma hinchada,
pero el justo vivirá por su fe.»

Palabra de Dios.

MEDITACIÓN
El profeta Habacuc vive en el periodo que dista entre la decadencia de Asiria, el gran imperio que ha conquistado Samaría y el renacimiento de Babilonia, quien tomará Jerusalén. En esas circunstancias Israel se halla a merced de ellos y por consiguiente la opresión y la violencia anidan en la tierra y tiempo del profeta (622-612 a.C.).
Los profetas en general preguntan al pueblo y le recriminan la falta de fidelidad de la sociedad hacia Dios, sin embargo, Habacuc no sólo clama contra el pueblo sino también contra Dios. Así el libro comienza con esta pregunta: “¿Hasta cuando, Señor, pediré auxilio sin que me escuches?
Es ésta una pregunta ante la cual no permanecemos indiferentes, es la que brota tras contemplar tragedias humanas, el grito desolador que busca respuesta en Dios. Y Dios responde e invita al profeta a la paciencia y a esperar, apoyado en la fe, en la confianza en Dios.
También nosotros nos hacemos esa pregunta y descubrimos la respuesta en Jesús. Él es el triunfo del justo. En la cruz hacemos nuestra la primera parte, en la resurrección encontramos cumplida la segunda parte. La fe es la que nos lleva a esperar, sabiendo que Dios no defrauda, confiados en el mensaje de Jesús y en la fe en su resurrección y la nuestra.
Así te invito a orar entrando en google imágenes y buscar fotografías con las palabras “destrucción, muerte”, después toma la Biblia y lee el capítulo 1 y 2 del libro de Habacuc, iluminando estas imágenes con la Palabra de Dios.
SALMO RESPONSORIAL. Sal 94, 1-2. 6-7. 8-9 (R/.: 8)



R/. Ojalá escuchéis hoy la voz del Señor:
«No endurezcáis vuestro corazón.»

Venid, aclamemos al Señor,
demos vítores a la Roca que nos salva;
entremos a su presencia dándole gracias,
aclamándolo con cantos. R/.

Entrad, postrémonos por tierra,
bendiciendo al Señor, creador nuestro.
Porque él es nuestro Dios,
y nosotros su pueblo,
el rebaño que él guía. R/.

Ojalá escuchéis hoy su voz:
«No endurezcáis el corazón como en Meribá,
como el día de Masá en el desierto;
cuando vuestros padres me pusieron a prueba
y me tentaron, aunque habían visto mis obras.» R/.
MEDITACIÓN
Con Israel: nos encontramos ante un himno procesional recitado quizá en la fiesta de las Tiendas, en él los levitas invitan al pueblo a participar activamente en la celebración.
Con Jesús: es la invitación de Jesús a escucharle, Él es “la roca que nos salva” y nos invita a tener un corazón abierto a su Palabra.
Con nuestro tiempo: la fe es acoger a Cristo y construir nuestra vida sobre la roca que es Él, desde la gratitud y la alabanza, siguiendo a quien es nuestro pastor y luchando cada día por evitar la tentación de endurecer nuestro corazón probando a Jesús, buscando un Dios a nuestro servicio.
Con los juniors: este salmo es recitado por todas las personas que cada día interrumpimos nuestros quehaceres para dedicar un tiempo a la oración, al amanecer, durante la jornada, al atardecer y antes de dormir. Es la Liturgia de las Horas, los laudes, Hora Intermedia, Vísperas, Completas y Oficio de Lecturas (en algunos monasterios y en las cartujas a mitad de la noche). Y ésta comienza así, la jornada de oración comienza todos los días recitando este salmo, es el medio con que la Iglesia y los que oran con ella nos despertamos, entrando en la presencia de Dios no protestando, ni pidiendo, ni amenazando, sino sencillamente dándole gracias por estar en su Presencia. También nosotros, en cuanto movimiento laical, podríamos hacer el esfuerzo cada día de unirnos a la oración de la Iglesia. Hoy no es necesario comprarse el libro, en esta web encontrarás cada día las oraciones: http://www.liturgiadelashoras.com.ar/ , con un clic y dedicando cada cierto tiempo 10 minutos te unirás a toda la Iglesia, rezando lo mismo que rezan los sacerdotes, religiosos y religiosas. O, ¿por qué no comenzar la oración de la mañana en los campamentos recitando este salmo?

Inspirado y tomado de: http://www.mercaba.org/DIESDOMINI/T-O/27C/marco_do_27c.htm

SEGUNDA LECTURA
Lectura de la segunda carta del apóstol san Pablo a Timoteo 1, 6-8. 13-14

Querido hermano:
Reaviva el don de Dios, que recibiste cuando te impuse las manos; porque Dios no nos ha dado un espíritu cobarde, sino un espíritu de energía, amor y buen juicio.
No te avergüences de dar testimonio de nuestro Señor y de mí, su prisionero.
Toma parte en los duros trabajos del Evangelio, según la fuerza de Dios. Ten delante la visión que yo te di con mis palabras sensatas y vive con fe y amor en Cristo Jesús.
Guarda este precioso depósito con la ayuda del Espíritu Santo que habita en nosotros.
Palabra de Dios.

MEDITACIÓN:
El Apóstol se encuentra en la cárcel de Roma, esperando su ejecución. Y desde allí dirige la segunda carta a Timoteo, a modo de testamento. Este discípulo era hijo de padre pagano y madre judía convertida al cristianismo, quien con la abuela le iniciaron en la fe. No son tiempos fáciles para Pablo ni para sus discípulos, pues él se halla en la cárcel y ciertamente ello provoca turbación y desaliento. Ante estas circunstancias el Apóstol le invita a reavivar el don recibido mediante el gesto de la imposición de manos, el que se utiliza en la confirmación y orden sacerdotal, dando testimonio de Jesús y cuidando su mensaje.
El texto nos ayuda a nosotros y es una excelente invitación al comenzar el curso para entusiasmarnos con las activid ades que vamos a realizar. Dios nos invita a recordar los momentos en los que dijimos sí y recibimos la misión de ser testigos de Cristo: el bautismo, la primera comunión y la confirmación, unidos a toda la Iglesia y también los ritos propios de nuestro movimiento junior. Es una buena oportunidad para recordarlos, especialmente aquellos en los que el consiliario nos envió a ser testigos de Jesús.
Ahora es el momento de leer el texto y descubrir las palabras de ánimo y ayuda para emprender el nuevo curso en el que vas a tomar parte de los “duros trabajos del Evangelio”, recuerda, duros, no es fácil ser educador junior.



EVANGELIO
+ Lectura del santo evangelio según san Lucas 17, 5-10

En aquel tiempo, los apóstoles le pidieron al Señor:
— «Auméntanos la fe.»
El Señor contestó:
— «Si tuvierais fe como un granito de mostaza, diríais a esa morera:
“Arráncate de raíz y plántate en el mar.”
Y os obedecería.
Suponed que un criado vuestro trabaja como labrador o como pastor; cuando vuelve del campo, ¿quién de vosotros le dice:
“En seguida, ven y ponte a la mesa”? ¿No le diréis:
“Prepárame de cenar, cíñete y sírveme mientras como y bebo, y después comerás y beberás tú”?
¿Tenéis que estar agradecidos al criado porque ha hecho lo mandado? Lo mismo vosotros: Cuando hayáis hecho todo lo mandado, decid:
“Somos unos pobres siervos, hemos hecho lo que teníamos que hacer.”»

Palabra del Señor.

MEDITACIÓN
El Evangelio de hoy se divide en dos partes y para comprenderlo es necesario antes leer los fragmentos previos. Los apóstoles han escuchado de Jesús una serie de instrucciones en las que les ha advertido sobre el mal uso de las riquezas (Lc 16), como bien se recordará de los dos domingos anteriores. Entre estos fragmentos y el presente se hayan dos mandatos en los que Jesús les advierte sobre el castigo que recibirán si escandalizan y les invita a reprender y perdonar al hermano (Lc 17, 1-4).
Situados en este contexto los apóstoles, cansados y conscientes de la radicalidad de las enseñanzas y su impotencia para vivirlas piden a Jesús les aumente la fe. Él les responde con la imagen del grano de mostaza, pues no es la cantidad, sino la calidad lo que importa. La fe no se mide, se tiene o no se tiene y el problema de los apóstoles es que no tienen fe y por eso no pueden llevar a término la radicalidad del Camino de Jerusalén, son incapaces de vivir el morir y resucitar. Pues si tuvieran fe harían posible lo imposible, como le ocurrió a Jesús que fue arrancado de raíz de esta tierra y plantado en el mar de la vida eterna. Lo que humanamente es imposible en Jesús se realizará cuando muera en la cruz y resucite, su cuerpo será plantado en la eternidad de Dios. También nosotros si tenemos fe podremos plantarnos en el mar. Es decir, la fe nos lleva a arrancarnos de nuestras seguridades que son muchas y como la morera, un árbol cuyas raíces son enormes y por tanto no es fácil arrancarlo de la tierra, nuestra vida dejará de sustentarse en nuestras seguridades (creer sólo en lo que vemos, construir nuestra vida desde el cimiento del tener, disfrutar y triunfar) para apoyarse en las aguas de Dios.
La segunda parte ilumina nos sitúa en el ámbito del discipulado. El amo es Dios y nosotros somos sus siervos. A diferencia de los fariseos que esperaban recompensa por cumplir la Ley, el cristiano no tiene ningún derecho adquirido, no puede cumplir el Evangelio para así tener garantizado un premio en la vida eterna. Con ello cambia nuestra mentalidad y la de muchas personas que han vivido su vida amargadas y cumpliendo las enseñanzas de la Iglesia no porque consideraban que con ellas eran más felices sino porque así al atardecer Dios los sentaría a la mesa. Nuestra actitud es diferente, como bien afirmaba un rabino “si has practicado mucho la Torá, no alardees por ello, porque para eso has sido creado”.
Dicho en palabras nuestras si eres un buen educador junior no alardees de ello ni esperes ninguna recompensa, para eso has sido enviado por el consiliario. La última frase debiéramos repetirla muchas veces, especialmente en estas semanas, en las que en los centros se reparten los cargos y las tareas. Quizás un nuevo año no nos han “premiado” todo el esfuerzo realizado durante el curso pasado y el campamento, o no han tenido en cuenta todo ello para darnos el mismo equipo, el cual gracias a nuestra labor participó todas las semanas en las actividades del centro y asistieron casi todos al campamento y con el comienzo del curso se lo han ofrecido a otro educador. Esta frase nos cura de todo ello: “Somos unos pobres siervos, hemos hecho lo que teníamos que hacer.”



LOS SANTOS PADRES

Los discípulos rogaban al Señor que se les concediera, habiendo puesto ellos antes fe de su parte, y ciertamente se la otorgó tras el cumplimiento de su plan salvífico mediante la venida del Espíritu Santo. Y es que antes de la resurrección era tan débil su fe que se les podría acusar de falta de fe.

Cirilo de Alejandría.

Tu no dices a ese siervo tuyo: siéntate a la mesa, sino que le exiges sus servicios sin darle las gracias; de la misma manera, el Señor no puede admitir que te adueñes del mérito de una acción o trabajo, ya que , mientras vivimos,, es nuestro deber trabajar siempre.
Por tanto vive con la convicción de que eres un siervo al que se han encomendado muchos trabajos. No te creas más de lo que eres porque eres llamado, hijo de Dios ni te envanezcas de haber servido con fidelidad, ya que ése era tu deber. El sol realiza su labor, obedece la luna, los ángeles también sirven… Por tanto, tampoco nosotros pretendamos alabarnos a nosotros mismos, ni nos anticipemos al juicio de Dios, ni nos adelantemos a la sentencia del Juez, antes bien, esperemos su día y su juicio.
Ambrosio

Cuando hayáis hecho todo lo que se nos ha mandado, decid: Somos unos siervos inútiles. Con estas palabras nuestro Señor Jesucristo q quería prevenir a sus apóstoles para que estuvieran lejos del veneno de la vanagloria. Mira, hermano, que aspirar a la gloria humana y practicar las buenas acciones con ese fin no vale de nada. Si después de hacer el bien, el orgullo hincha el corazón, ahí termina todo sacrificio, tiene lugar, el empobrecimiento, y no se gana nada.

Juan Crisóstomo


ORACIÓN DESDE LA METODOLOGÍA JUNIOR.

Experiencia:
T Seguramente en tu ordenador guardes las fotografías del campamento y los cursos anteriores, o quizás en el tuenti o face book las habéis colgado. Abre los archivos y míralas: ¿cómo te sentías en esos momentos? ¿en cuál de ellos te ilusionaste mucho? ¿las celebraciones y oraciones eran momentos importantes para ti en los que te llenabas de Dios, ilusión, deseos de mejorar,… y descubrías en ellas la razón de estar allí dedicando horas a tu centro junior o más bien eran las actividades más aburridas, a las que por obligación tenías que asistir?

Reflexión.-

Los apóstoles no eran ángeles ni superhombres, sino personas como tú y yo. En el Camino de Jerusalén Jesús ha intensificado el ritmo, las exigencias son numerosas (radicalidad evangélica, amor a todos, desenraizamiento de lo que es la tierra sobre la que construimos nuestra vida: un buen futuro o búsqueda de una buena y privilegiada posición económica, social, eclesial, dinero, poder, disfrute,…), sin embargo ellos no pueden con estas exigencias y esperan otra forma de vivir, descubren que su fe es muy pequeña y le piden a Jesús se la aumente. La respuesta es directa, en resumen: no tenéis fe y no debéis esperar ninguna recompensa en este mundo. Así pues sitúate en el lugar de los Apóstoles. Quizás tú seas esa persona cansada, que continúa este año sin motivación, simplemente por no decirle no al consiliario o al equipo de monitores, a lo mejor la misa es lo más árido del día. Pregúntale a Jesús y escucha su respuesta.

Compromiso.-

Durante esta semana antes de acostarme recordar todas las cosas buenas que he realizado, concluyendo con la última frase del Evangelio, interiorizándola: “Soy un pobre siervo, he hecho lo que tenía que hacer”.

Celebración:

Entra en
http://www.benedictinescat.com/Montserrat/imatges/Sa94d27C10cas.pps , mira la presentación, con el ratón en la mano, pausadamente, escuchando la música. Lo importante no es verla toda, sino saborearla. Quédate orando en la diapositiva que más te diga algo y te ayude a rezar: contempla, escucha, háblale a Jesús desde ella.



Oración.


Esta tarde, Señor, estoy solo.
Poco a poco los ruidos del centro junior se han callado,
los niños y educadores de han ido
y yo he vuelto a casa,
solo.

Y heme aquí, Señor,
solo.

El silencio es amargo, la soledad me aplasta…

Señor,
tengo un corazón deestinado al amor,
pero yo te lo he dado a ti
porque en verdad que a ti te hacía falta,
pero no es fácil.

Es duro amar a todos sin reservarse nadie,
es duro estrechar una mano sin querer retenerla,
es duro hacer nacer un cariño tan sólo para dártelo,
es duro no ser para sí mismo para serlo todo para ellos,
es duro ser como los niños, estar entre los niños y ser otro, el educador,
es duro dar el tiempo al movimiento juniors, sin esperar la paga,
es duro ir delante del equipo sinn que ellos vayan delante de uno.
Es duro arrastrar el equipo y no poder jamás
ni por un instante dejarse arrastrar un poco,
es duro sostener a los débiles, sin poder apoyarse sobre ellos.

Heme aquí, Señor,
he aquí mi persona,
he aquí mi corazón,
he aquí mi alma.
Dame el ser lo bastante grande para abarcar el mundo,
lo bastante fuerte para poder llevar sobre mis hombros el equipo.
Concédeme el ser tierra de encuentro, pero sólo tierra de paso,
camiono que no conduzca a sí mismo sino que lleve a ti.

Adaptación a la realidad del educador, de la oración de Michel Quoist. El sacerdote: oración del domingo por la tarde. Oraciones para rezar por la calle.

La oración original la encontraras en: http://www.vicariadepastoral.org.mx/proyectos/anno_jubilar/pensamientos/pensamientos_15.htm


GUIÓN CELEBRACIÓN DE LA EUCARISTÍA.
Monición de entrada:
Queridos hermanos y hermanas:
Ya estamos en el mes de octubre, en el que pronto comenzará la catequesis de comunión, los juniors y toda las actividades de la parroquia. Serán meses de trabajo y seguro que en más de una ocasión las catequistas y hasta los niños y jóvenes nos cansaremos, por eso necesitaremos de la misa. Ésta no es un trabajo más, sino el momento para encender la fe y así no desanimarnos.

Señor, ten piedad.
Porque nos cansamos de seguirte. Señor, ten piedad.
Porque nos cuesta vivir el evangelio. Cristo, ten piedad.
Porque no tenemos fe. Señor, ten piedad.

Monición a las lecturas.
En la primera lectura escucharemos unas preguntas que todos nos hacemos alguna vez: ¿hasta cuando van a sufrir las personas buenas? Y Dios nos dará la respuesta. San Pablo por otra parte nos invitará a que reavivemos el don que recibimos, es decir, recordemos con entusiasmo el día en que fuimos bautizados, tomamos la primera comunión, muchos de vosotros os confirmasteis y os casasteis y nuestro sacerdote recibió la ordenación sacerdotal.

Monición evangelio.
Hola: Soy Bartolomé, uno de los apóstoles. Jesús un día empezó a decirnos todo lo que teníamos que hacer si queríamos ser amigos suyos de los buenos. Y nosotros, pues estuvimos a punto de dejarle porque nos pedía muchas cosas. Pero antes, yo le hice una pregunta. ¿Qué cuál? Pues estad antentos.

Homilía. En diversos lugares de la Iglesia hemos colocado diferentes hojas, entre ellas una de morera, los niños han de buscarlas y traer la de morera. Si es complicado, podemos pegar en cada una de ellas un papelito con el nombre. También si esta cerca podemos ir y buscar este árbol. A partir de ahí les explicamos como esta planta tiene unas raíces fuertes y grandes, pero con la fe de una semilla (se la mostramos) todo es posible. También nosotros nos cogemos a nuestros intereses, esas son las raíces (queremos tenerlo todo, no nos preocupamos de los que sufren, preferimos ver la tele o estar en internet a estar un rato con los padres o visitar a los abuelos,…), es muy difícil arrancarnos de nosotros mismos, pero con Jesús es posible.


Peticiones.-

Por el Papa y los obispos, para que Jesús les ilumine en su tarea de conducir a la Iglesia. Roguemos al Señor.
Por los sacerdotes, especialmente aquellos que al comenzar el curso están desanimados, para que reaviven el don recibido el día de su ordenación. Roguemos al Señor.
Por las catequistas, que este mes van a emprender las tareas, para que no se cansen. Roguemos al Señor.
Por las personas que sufren, para que no pierdan la esperanza de un futuro mejor. Roguemos al Señor.
Por nosotros, para que nunca nos cansemos de ser buenos cristianos. Roguemos al Señor.


JÓVENES EJEMPLARES:
Beata Chiara “Luce” Badano (7 Octubre)
http://www.chiaralucebadano.it
El pasado sábado 24 de septiembre fue beatificada esta joven italiana. Y lo sorprendente de ella es su edad, contemporánea nuestra. Si la muerte no hubiese cortado esta rosa, actualmente tendría 38 años y este mes cumpliría los 39, una joven como muchos de nosotros. Pero acerquémonos a su vida, dejemos que la luz de su mirada y sonrisa ilumine la nuestra.
Nos encontramos en Italia, en concreto en Sassello, un pueblecito cercano a Genova, cuya población ronda los 1800 habitantes, superando cuando nació nuestra joven los 2000, situado en la diócesis de Acqui Terme. Es otoño, 29 de Octubre de 1971. Ella, Mª Teresa, obrera, está dando a luz una niña, él, Ruggero, camionero, espera con la ilusión de todo padre poder abrazar a la hija, fruto de un deseo añorado durante once años. Ambos consideran una gracia de la Virgen de la Rocche, a quien habían recurrido confiadamente.
La niña nace y recibe un nombre con el que no sólo será llamada, sino expresará el significado de su vida: Chiara, Clara. Así será siempre: ojos límpidos y grandes, sonrisa dulce y comunicativa, inteligente, vivaz, alegre y deportista.
Desde el primer momento sus padres la ofrecen a Dios, no es sólo hija suya, sino del Padre y Dios la tomó para sí, llevándola a los altares y haciendo de ella un espejo de su amor. Así la niña crece acompañada por la formación cristiana que le ofrecen sus padres, desde el jardín de infancia mete sus ahorros en una cajita para los niños de África y sueña con poder marchar a este continente como médico para curarles.
Chiara es una niña como todas las que vivían en los años 70. De sus cuadernos de los primeros años en la escuela trasparenta alegría y asombro en descubrir la vida. Es una niña feliz. El día de su Primera Comunión recibe el libro de los Evangelios, “Como para mí es fácil aprender el alfabeto, así debe de ser para vivir el Evangelio también”.
A los 9 años ingresa en un movimiento juvenil, es decir, si os fijáis, su vida es muy semejante al nuestro. Ella pasa a formar parte como Gen en el Movimiento de los Focolares, fundado por Chiara Lubich. Sus padres, gracias a ella, van integrándose en este movimiento católico. La vida sigue, llega la adolescencia, el bachillerato, los exámenes y suspende cuarto. En casa alguna incomprensión, a ella le gusta quedarse de noche con los amigos en un café y los padres, les gusta que llegue pronto a casa.
También le gusta vestirse con propiedad, peinarse bien y algunas veces maquillarse un poco, es una joven como todas las de su tiempo, eso sí, con una sólida base humana y religiosa. Y ello le lleva a ser querida por todos, a estar siempre rodeada de amigos y amigas, con quienes practica el deporte: tenis, natación, montaña. Y como no, cantar, bailar y alguna que otra vez dejarse cortejar por un chico o decirle a la amiga, mirando a un muchacho: “ese me gusta”. En verano de 1988 suspende matemáticas y marcha a Roma al congreso de las jóvenes del movimiento, las Gen 4. Allí confiesa: “Ha llegado un momento muy importante, el del encuentro con Jesús abandonado, Él debe ser su esposo”.
Y así va a ser, un esposo al que se va a unir ofreciéndole el dolor en el lecho de la enfermedad. A los 17 años un dolor lacerante en el hombro izquierdo se convierte en el umbral del via crucis que va a recorrer. Chiara tiene cáncer, uno de los más dolorosos, pues se desarrolla en los huesos: sarcoma osteogénico con mestástasis.
Cualquiera de nosotros nos podemos imaginar lo que ello representaba. Quienes hemos conocido a algún joven que ha muerto de cáncer sabemos muy bien el calvario que es tener que abandonar la vida en plena primavera, sentir como una tijera de podar va lentamente cortando la rosa. Chiara no va a poder cumplir los 19 años, ni los 30 ni los 40.
Ella calla al conocer el diagnóstico, sólo después de veinticinco minutos pronuncia una palabra: sí a la voluntad de Dios, y repetirá durante su breve enfermedad: Sí lo quieres Tú, Jesús, lo quiero yo también. El cáncer no apaga su sonrisa luminosa, con fortaleza se enfrenta a las curas dolorosas, al drama que representa para toda mujer perder el pelo como consecuencia de la “quimio”, y ella ante cada mechón exclama: “por ti Jesús”.
No sólo acepta con paz la enfermedad sino que además esta le sirve para compartir. Toma todos sus ahorros y los entrega a un amigo a una misión humanitaria en África: “a mí no me sirven, yo tengo todo”.
Rechaza la morfina porque le quita la lucidez mental y ofrece los sufrimientos por la Iglesia, los jóvenes, las personas que no creen, el movimiento de los Focolares, las misiones,… “No tengo nada más, pero tengo aún mi corazón y con él puedo amar”. Y así lo hace. En la habitación del hospital de Turín y en su casa Chiara, se siente amada por Dios, “El me ama intensamente” y ella ama y ofrece su testimonio de joven enamorada de Jesucristo a todos, a los médicos, a los amigos,… Todos descubren en ella un imán que los atrae. Después de una noche marcada por el dolor sus palabras son: “Yo sufría mucho, pero mi alma cantaba…”. En otra ocasión afirma: “vosotros no podéis imaginar cual es mi relación ahora con Jesús… Yo estaba demasiado absorbida por tantas ambiciones, proyectos y quién sabe lo que más. Ahora me parecen cosas insignificantes, baladíes y pasajeras… ahora me siento envuelta en un espléndido designio que poco a poco se me revela”. Y reza a Jesús y a la Virgen María. La fundadora de los focolares añade a su nombre “Luce”, porque ella es luz para los jóvenes: “los jóvenes son el futuro. Yo no puedo correr más, pero quisiera pasar a ellos la antorcha como en las olimpiadas. Los jóvenes tienen una sola vida y vale la pena gastarla bien”.
La enfermedad avanza, el día 7 de octubre de 1990 es la festividad de la Virgen del Rosario. Después una noche de agonía, le habla por última vez a su madre: “Mamá, sé feliz, porque yo lo soy, Adiós”. Y Chiara muere, sin perder la luz en sus ojos, la paz en sus labios, ofreciendo sus córneas para un trasplante.
El día 25 de Octubre fue beatificada, en el Ángelus del domingo el Papa Benedicto XVI afirmó: "Sólo el Amor con la A mayúscula da la verdadera felicidad! Lo demuestra también el testimonio de otra joven que ayer fue proclamada beata en Roma. Hablo de Chiara Badano, una chica italiana nacida en 1971, que una enfermedad llevó a la muerte poco antes de que cumpliera 19 años, pero que fue para todos un rayo de luz, como decía su apodo "Chiara Luce (Clara luz). [La beatificación de Chiara Badano es] una fiesta para todos los jóvenes que pueden encontrar en ella un ejemplo de coherencia cristiana".